Carlos Cienfuegos lamentó que “cuando empiezan a entrar las autoridades es cuando empiezan a echar las cosas a perder”.
Regeneración, 4 de octubre de 2017.- Carlos Cienfuegos, comandante de los Topos Usar Brec y legendario rescatista que participó también tras el sismo del 85, se retiró junto con su cuadrilla de las ruinas del edificio colapsado en Álvaro Obregón 286 pues dijo que, desde el 2 de octubre, las autoridades ya no los dejaban trabajar.
«No tiene caso que estemos aquí. Normalmente no nos vamos hasta que se recupera la última víctima, pero hay gente que está viva en Tetela del Volcán, en Puebla, que se quedó sin casa, queda cerca de la Ciudad y podemos ir a apoyarlos para hacer casas de triplay y polines”.
Además, dijo que, de no ser por el control autoritario del gobierno, se hubieran rescatado más cuerpos con vida.
«Como en todos lados están haciendo sus protocolos de Estados Unidos que no sirven en países latinos, somos latinos, somos mexicanos, el pueblo de México sirvió al pueblo de México.
Lamentó que “cuando empiezan a entrar las autoridades es cuando empiezan a echar las cosas a perder”.
El rescatista enfatizó que, si los hubieran dejado entrar más al edificio, se habrían rescatado más vidas.
“Desde que llegamos aquí están con que se va a colapsar (el edificio) y se van a morir todos y se va acabar el mundo y siguen igual, se ha movido la loza, pero este tipo de colapsos es el más seguro de todos, cuando un edificio está roto y no ha colapsado es peligroso, este edificio está colapsado, ya no se puede colapsar, es miedo, el miedo es ignorancia y la ignorancia causa muertes”, dijo.
Se le cuestionó si con la ayuda de un perro hubieran podido rescatar a más personas en los últimos días, pero indicó que, por lo complicado de los escombros y los huecos, los perros ya no eran necesarios como en los primeros días, cuando incluso la calidad del aire era diferente para que sus olfatos pudieran detectar a alguien bajo los escombros.
También le preguntaron si ellos hubieran podido entrar por los huecos y respondió tajantemente que no los dejaron entrar.
“Nos retiramos mejor, no hablo mal de la gente porque estoy enojado y cuando lo estoy hablo de más”.
El topo aseguró que intentó hablar con Miguel Ángel Mancera, jefe de gobierno de la Ciudad de México, para comentarle sus observaciones pero no le tomaron la llamada.
Con información de Radio Fórmula