López Obrador precisó: “Ante la intención de la derecha de implantar el bipartidismo en nuestro país, una idea que siempre han tenido los potentados para seguir engañando con la alternancia entre el PRI y el PAN, que representan lo mismo. Señalé que muchos mexicanos estamos decididos a luchar por un verdadero cambio y expresé mi disposición a contender en las elecciones presidenciales del 2012, para volverle a ganar a la mafia del poder”.
–¿Están de acuerdo?, ¿Vamos?– preguntó López Obrador a los asistentes. –Vamos–, respondieron con júbilo miles de gargantas que unieron sus voces en una sola.
Andrés Manuel convocó “a todos los afectados y agraviados por la política neoliberal, que es la inmensa mayoría del pueblo de México, a que juntos acabemos, de una vez y para siempre, con esa absurda e inhumana pesadilla”.
Tomemos la iniciativa
A nombre de los miles de comités del movimiento que se han constituido en todo el país, hablaron 32 representantes, uno por estado. Explicaron el trabajo de organización y de concientización de la gente a través de Regeneración. Interesante mosaico nacional en el que destacaron indígenas, jóvenes y mujeres. Una muchacha de Monterrey describió con entusiasmo cómo su familia participa en el movimiento y su casa se ha convertido en centro de organización.
“Tomemos ya la iniciativa para organizarnos –los invitó López Obrador–, empecemos formando comités con los integrantes de nuestras familias. Podemos hacer comités con amigos, compañeros de trabajo, en rancherías, ejidos, pueblos, barrios, colonias o unidades habitacionales… Tenemos que organizarnos bien para enfrentar de nuevo a la mafia del poder”.
“¿Cómo podemos lograr que se respete la voluntad del pueblo?” –se preguntó–; la única forma es que nos organicemos desde abajo. Que en donde se va a instalar una casilla haya uno o dos comités. Que el pueblo esté organizado, que se convoque a votar a la gente y también a defender los votos. Tenemos que consolidar esta organización y seguir concientizando para lograr el despertar del pueblo y la insurgencia cívica que hará posible la transformación pacífica del país”.
A pesar de todas las adversidades y del cerco informativo, el movimiento en torno a AMLO mostró su fuerza y su organización. Sigue dando la lucha en defensa del petróleo, la economía popular, la seguridad social y en apoyo a los electricistas y a los mineros, en las gestas ciudadanas contra el despojo a la población y el saqueo de los recursos nacionales. El reto es hacer, entre todos, que el cambio sea inevitable.