El medio de comunicación RT logró entrar en el restrictivo país Corea del Norte donde entrevistó a ciudadanos que aseguraron ser las personas más felices del mundo.
Regeneración, 10 de julio de 2017.- Un equipo de RT entró a Corea del Norte y logró captar algunas de las facetas no vistas sobre la gente de aquel país.
Según RT, los acercamientos a las personas se hicieron durante las dos principales festividades, que es cuando se permite el paso al país a personas extranjeras.
Aunque en el país no hay acceso libre a internet (solo se puede utilizar una red interna), los ciudadanos sostienen que viven en el país más poderoso y económicamente desarrollado del planeta.
«Gracias a la estabilidad de la revolución de nuestro líder y comandante supremo, nuestro país se ha convertido en el mejor país del mundo. Y los que se atreven a pensar de otra manera son nuestros enemigos», declaró Pak Chol San, un estudiante distinguido.
Según él, los surcoreanos «son meros títeres» que «tratan de acabar con nuestro sistema socialista con la ayuda de los ocupantes estadounidenses, que se sienten como en casa en Corea del Sur».
«Básicamente, Estados Unidos no quiere que nuestro país prospere», indicó.
Por otro lado, la estudiante distinguida Kim Chung Bok, contó que viendo las noticias se ha enterado de que en el extranjero «si te tienen que hospitalizar, incluso la prueba más simple que te tengas que hacer cuesta dinero».
«En lo que se refiere a nuestro país, todo, ya sea una prueba rutinaria o una cirugía o cualquier medicamento, todo lo cubre el Estado. Al contrario que en nuestro país, ustedes no pueden tener una educación o un tratamiento médico socialistas gratuitos, ¿verdad?», cuestionó.
«La gente de este país es envidiada por todo el mundo, y estamos orgullosos de ello».
Durante la incursión, RT tuvo acceso a uno de los orfanatos del país asiático en donde se privilegia la limpieza y disciplina, y en el que van a parar todos los niños que no tienen padres.
El líder norcoreano ordenó construir el campamento infantil Songdowon, junto a él existe una estación de tren para dar servicio específicamente a estos menores.
«¿Cuál es la situación en los países capitalistas? Los niños sin padres no tienen un hogar, son dejados a su suerte y van vagando por todos lados. En nuestro país es inaudito que un niño huérfano no tenga un lugar adonde ir», dijo Kim Sang Yong, director del campamento.
El director, quien también fue huérfano, compartió que dentro del orfanato, todos llaman a Pionyang padre, pues es él quien dirige el estado y quien cubre todas sus necesidades.
«Nosotros, los huérfanos, sentimos más que nadie el amor de nuestro amado y respetado líder, y por eso somos más felices que los niños que sí tienen padres. Hace que no envidiemos nada a absolutamente nadie», afirmó Ko Jin.
Se puede ver el material aquí.