Regeneración 11 de enero 2016.- La Procuradora General de Justicia de Estados Unidos declaró que si bien la captura Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera representa una “reivindicación de la aplicación de la ley”, la estructura del Cártel de Sinaloa permanece intacta y el gobierno estadounidense continúa considerándola la más poderosa del tráfico de drogas, pues controla casi en su totalidad el mercado norteamericano.
De acuerdo con diversos análisis de la DEA y otras agencias como el Pentágono o la CIA, el Chapo Guzmán se convirtió desde hace años en el líder simbólico del Cartel de Sinaloa, sin embargo, ya no es su operador activo.
“Era la figura mas relevante del narcotráfico en México. Su nombre y su alias son reconocidos en todo el mundo, pero eso no implicaba que fuera la cara principal ni el brazo más importante del Cártel de Sinaloa”, afirma un agente de la DEA que prefirió mantenerse en el anonimato.
La DEA, con el objeto de demostrar que el Cartel de Sinaloa es responsable del contrabando de drogas desde México, realizó diversos mapas de los 50 estados donde ese grupo controla la entrega.
Enlistó las organizaciones mexicanas por su relevancia: Cártel de Sinaloa, Cártel de Jalisco Nueva Generación, los Beltrán Leyva, los Zetas, Cártel del Golfo, Juárez/la Línea, la Familia Michoacana y los Caballeros Templarios.
Durante el tiempo que el Chapo pasó en prisión y los casi seis meses que fue fugitivo de la justicia, el Cártel de Sinaloa siguió creciendo.
Lo que es más, agencias estadounidenses sostienen que las fracciones que realmente manejan el Cártel de Sinaloa, están dirigidas por Ismael El Mayo Zambada García y sus hijos, así como los del Chapo Guzmán y los de Juan José Esparragoza Moreno.
Con información de Proceso.