En el Día Internacional de la Vaquita Marina, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) entregó a la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente (Semarnat) una carta con 220 mil firmas de 140 países, en la que le exige proteger a este mamífero.
Regeneración, 9 de julio de 2017.- El director general de WWF México, Jorge Ricards, encabezó la conferencia que el fondo ofreció este sábado, en el Zócalo capitalino, para lanzar un llamado a cuidar al que es el cetáceo de menor tamaño de toda la naturaleza.
El primero de julio se dio un paso muy importante por parte del gobierno federal para proteger a la vaquita, fue el decreto permanente de las redes de malla que han sido la principal causa, la causa única comprobada de muerte de la vaquita”, subrayó.
“Todavía falta mucho para poder salvar a la especie. ¿Qué es lo que falta? esto tiene que venir acompañado de apoyo a los pescadores locales tiene que venir acompañado de alternativas de pesca sustentable”.
En 2014, la población de vaquitas marinas era de 97, para 2015 se redujo a 60 y actualmente sólo sobreviven 30, en el Alto Golfo de California, el único lugar en donde habitan, dijo en el evento el director general de vida silvestre de la Semarnat, José Luis Funes.
“Estamos involucrados más de 22 dependencias del gobierno federal. En este sentido, vamos a seguir trabajando para esta aplicación efectiva de la normativa ambiental de la zona, no solamente es un problema de México también lo compartimos con Estados Unidos y China por el tráfico de totoaba”, señaló el funcionario.
La campaña de WWF para salvar a la vaquita marina continúa con el trabajo conjunto con el gobierno federal y pescadores de la región.
El Presidente Peña se comprometió recientemente con el actor Leonardo DiCaprio y el empresario Carlos Slim, para la elaboración de un plan de rescate, como decenas de ONGs le exigieron durante años.
Sin embargo, la misma promesa se la hizo al ex Presidente de EU, Bnarack Obama, y hasta el momento, su única medida ha sido prohibir permanentemente el uso de las redes de enmalle que usan los pescadores del Alto Golfo para capturar totoaba.
Con información de: Excélsior