El término «hikikomori» proviene de Japón, son jóvenes que no estudian ni trabajan ni salen de su cuarto. Se han extendido por el mundo.
Regeneración, 10 de julio de 2016.- El término hikikomori fue acuñado en Japón y se refiere a individuos que se han aislado del mundo y no participan en ninguna actividad social.
Generalmente viven en el sótano de la casa de sus padres o en sus propios cuartos y pasan sus días en el Internet o jugando videojuegos. En Japón esto se considera un trastorno.
El fenómeno, sin embargo ha trascendido a Japón y se ha extendido por el mundo.
«Los hikikomoris son personas que llevan encerradas en casa o en su propia habitación más de 6 meses. No participan en el proceso educativo ni en ninguna actividad laboral. Rechazan por completo cualquier contacto con las personas», dijo el presidente del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Chiba (Japón), Masaomi Iyo.
«La mayoría del tiempo ven la televisión o se entretienen con videojuegos, no tienen amigos salvo algunos contactos virtuales. Cerca del 70% de los hikikomoris entienden que son una carga para la sociedad y la familia«, agregó Masaomi Iyo.
El problema existe mucho más allá de Japón. En México, por ejemplo, se ha institucionalizado el calificativo «Nini«, que se emplea para designar a personas que «ni estudian, ni trabajan». Sin embargo este calificativo también incluye a las personas que se encuentran inactivas por falta de oportunidades.
En Estados Unidos se forjó el término «NEET«, que se refiere a individuos que no estudian, no se encuentran empleados o en entrenamiento de ninguna clase (Not in Education, Employment, or Training).
En España, según informa RT, hay decenas de casos registrados. En algunas ocasiones pasan hasta 30 años aislados, un síntoma que demuestra la urgencia de intentar reintegrarlos a la sociedad.
¿Cómo ayudarlos?
Para eliminar ese peso y a la vez ayudar a estas personas, se han creado centros donde muchos voluntarios, junto con especialistas, intentan devolverlos a la vida social.
«Tenemos dos tipos de actividades: vienen al centro para hablar con los que tienen el mismo problema o con los empleados del centro. Es para restablecer la habilidad de comunicarse con otros. También les ayudan los que se han podido curar y comparten su propia experiencia. Es como un refugio transitorio», comentó la psicoterapeuta Yuri Iri.
Teatro, fútbol, música son algunas de las actividades que ofrecen estos centros. A través del entretenimiento y las sesiones psicológicas intentan encontrar la raíz del fenómeno en cada caso por separado. Y es que las razones por las que se pueden convertir en ‘hikikomoris’ son diversas.
¿Qué lo provoca?
Las causas varían de una persona a otra, pero, «por ejemplo la persona puede haber sido maltratada en la escuela por parte de otros alumnos. También por las altas expectativas de los padres, el hijo pierde su propia motivación. Convierte su vida en el intento de complacerlos y finalmente pierde sus propios sueños, y como consecuencia su personalidad», asegura por su parte Yohei Kuramitsu, también psicoterapeuta.
Con información de RT.