Magna exposición de Lilia Carrillo en el museo de Bellas Artes

«Todo es sugerente», en Bellas Artes, reúne obra a lo largo de su vida y descubre aspectos poco conocidos de la artista al público citadino

Regeneración, 15 de diciembre 2025– Lilia Carrillo (1930-1974), una pintora que tuvo una trayectoria exitosa durante al menos 20 años, alcanzó reconocimiento tanto en el ámbito comercial como en el institucional, además de destacar a nivel internacional con exhibiciones en Estados Unidos y Europa.

Mural

Su mural La ciudad desbordada, impureza del aire (1969) siempre se menciona, ya que fue mostrado en el Pabellón Mexicano durante la Feria Mundial de Osaka 70 en Japón.

Se dice que Carrillo es parte de la generación de la Ruptura mexicana.

Sin embargo, debido a su muerte prematura a los 43 años, aunque su nombre se recuerda, su obra ha caído un poco en el olvido.

“Es un caso inusual. No podría definir con precisión las causas”, menciona Daniel Garza Usabiaga, el curador de Lilia Carrillo.

Muestra

La muestra presentada en el Museo del Palacio de Bellas Artes, que cuenta con más de 100 obras, representa el regreso de Carrillo al museo después de más de 50 años.

Además, se revelan sus aspectos menos conocidos como ilustradora, escenógrafa y diseñadora de vestuario para el teatro vanguardista.

En la década de 1990, el Museo de Arte Contemporáneo en Monterrey le organizó una exposición.

En 1993, el poeta y ensayista Jaime Moreno Villarreal lanzó el libro Lilia Carrillo: La constelación secreta.

Fue muy exitoso en ventas, pero no se volvió a publicar, indica Garza Usabiaga.

Olvido

Moreno también menciona que este olvido se debe a “la limitada visibilidad de las mujeres en las instituciones durante la segunda mitad del siglo XX, y aún hoy en día.

“Cuando se comienza a contar a las artistas en el ámbito de la pintura o la escultura, se da cuenta de que son muchas.

Sin embargo, la mayoría ha estado bastante olvidada hasta hace poco, que se ha comenzado a investigar su obra. ”

Carrillo, originaria de la Ciudad de México, estudió pintura primero con Manuel Rodríguez Lozano, amigo de su madre.

Luego asistió a la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda, graduándose en 1951.

Paris

Dos años más tarde, se mudó a París con su primer esposo, el escritor Ricardo Guerra.

En esta ciudad, realizó su primera exposición individual en la Casa de México y regresó a México en 1956.

Carrillo comenzó como pintora figurativa, lo cual se refleja en el primer núcleo temático, Del realismo a la abstracción.

Cuando incursionó en el ámbito abstracto, se mantuvo fiel a su propuesta artística, «a diferencia de artistas como Manuel Felguérez, su segundo esposo.

O Kaszuya Sukai, quienes pasaron de lo gestual a lo geométrico.

Informalista

Lilia siempre fue una pintora gestual, abstracta, lírica e informalista, como se le quiera clasificar”, destaca el curador.

Su estilo es una abstracción gestual que incorpora un collage variado que no solo utiliza medios impresos, sino también objetos como trozos de tela.

En sus pinturas más recientes, los cortes no son tan visibles; no obstante, se encuentran dentro de la textura de la obra.