Arqueólogos la bautizaron como «la mujer de Tlailotlacan» y debió haber vivido hace mil 600 años en Teotihuacán.
Regeneración, 8 de julio de 2016.- Científicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) encontraron en Teotihuacán los restos de una «mujer de élite» con diversas modificaciones corporales.
Los arqueólogos la bautizaron como «la mujer de Tlailotlacan» y debió haber vivido hace mil 600 años. Calculan que falleció entre los 35 a 40 años. Los restos fueron encontrados en un predio de la colonia El Mirador, en el poblado San Juan Evangelista.
Los restos muestran una deformación craneal; su cabeza debió lucir alargada como consecuencia de una modificación que se logró comprimiendo el cráneo. Esta práctica no fue propia de la región del Altiplano Central mexicano donde se localiza Teotihuacán, sino del sur de Mesoamérica. Esto refuerza la percepción de que Teotihuacán era una ciudad cosmopolita donde personas de distintas regiones convergían. Tlailotlacan significa, de hecho «el barrio de la gente de tierras lejanas».
El cráneo también cuenta con modificaciones dentales; tenía pirita incrustada en los incisivos superiores y también una prótesis dental de serpentinita en lugar del incisivo inferior. Los científicos investigan si las piezas se añadieron con alguna clase de cementante o una fibra que la sujetara a la mandíbula.