Regeneración, 10 de noviembre del 2015.-Una mayoría de 123 de los 230 diputados de la cámara (siete más que la mayoría absoluta), aprobó la moción presentada por el Partido Socialista (PS) y la izquierda marxista para rechazar el programa de gobierno del primer ministro, Pedro Passos Coelho, para la próxima legislatura, informó el Parlamento en Lisboa.
Manifestantes a favor y en contra
Miles de manifestantes, la mayoría del principal sindicato de Portugal, celebraron junto a la escalinata del Parlamento, a la expectativa de la dimisión del primer ministro. Carteles contra la coalición de los gubernamentales Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha) y de los democristianos del CDS-PP inundaron las inmediaciones de la Asamblea donde, horas antes, se había producido otra protesta de signo contrario, en favor de la continuidad del Ejecutivo de Passos Coelho.
La coalición de dos partidos dirigida por Passos fue la fuerza más votada en los comicios del pasado 4 octubre con cerca del 39 por ciento, seis puntos más que el segundo, el líder socialista António Costa. Pero su victoria fue insuficiente para revalidar la mayoría parlamentaria de la anterior legislatura, cuando gobernó el país tras el rescate de la economía con un paquete de 78.000 millones de euros de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2011.
Tal ya se preveía, la caída de Passos Coehlo se produce apenas once días después de tomar posesión. El Bloque de Izquierda marxista, los comunistas y los Verdes quieren ahora apoyar un gobierno del líder socialista, António Costa, pero sin formar una coalición. Los grupos de izquierda juntos tienen mayoría en la Assembleia da República y en los últimos días acordaron un programa de gobierno conjunto, en el que se espera sobre todo una flexibilización de las políticas de ahorro y reformas.
¿Y ahora qué?
Tras la moción, al presidente de Estado Anibal Cavaco Silva le corresponde decidir en los próximos días si encarga a Costa la formación de gobierno. Pero hasta ese momento, Passos seguiría provisionalmente en funciones al frente del gobierno.
El presidente puede optar por dar el Ejecutivo a los socialistas, dejar a Passos Coelho en funciones hasta la convocatoria de nuevas elecciones (no podrían ser antes de junio de 2016) o apostar por un Gobierno de «iniciativa presidencial», formado por independientes de diferentes tendencias elegidos por él.
La Carta Magna no obliga a que el nuevo Ejecutivo someta a votación su programa, pero sí permite a la oposición presentar una «moción de rechazo» que, de ser aprobada, implica la dimisión del gabinete de ministros, como acaba de ocurrir. Desde la llegada de la democracia a Portugal, hace más de cuatro décadas, este recurso sólo prosperó una vez, en 1978, con el independiente Alfredo Nobre da Costa como líder del Gobierno, que gobernó, sin embargo, más de dos meses