Con EPN y Calderón, Kimberly Clark engañó a consumidores de productos de higiene

Kimberly Clark de México se coludió con otras dos empresas para incrementar los precios de pañales para bebé, productos de higiene menstrual y para la incontinencia de 2008 a 2014.

Con EPN y Calderón, Kimberly Clark engañó a consumidores de productos de higiene

Regeneración, 4 de noviembre del 2021. Los expresidentes Enrique Peña Nieto (2012-2018) y Felipe Calderón (2006-2012) permitieron que la empresa Kimberly Clark de México,de Claudio X. González Laporte, incrementara los precios de pañales para bebé, productos de higiene menstrual y para incontinencia durante.

Kimberly Clark de México (KCM) se coludió con las empresas Productos Internacionales Mabe y Essity Higiene y Salud México para manipular los precios de estos productos entre 2008 y 2014.

Durante seis años, las tres empresas se aliaron y controlaron los precios de dichos productos. Lo que provocó un daño de 1 mil 567 millones 36 mil 589 pesos en el mercado.

Los productos y marcas involucradas fueron:

  • Essity: Saba (toallas sanitarias) y Tena (pañales para adulto).
  • Productos Internacionales Mabe: BioBaby (pañales), Fiore (toallas) y Affective (pañales para adulto).
  • Kimberly Clark: Huggies, Kleen Bebé, PullUps (pañales de bebé); Kotex (toallas); Depend y Diapro (pañales para adulto).

De acuerdo con Sin Embargo, las compañías se reunían en secreto porque sabían que sus acciones eran ilegales. Además, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) inició una investigación, en 2017,sobre el comportamiento irregular de este mercado.

En octubre, la Cofece anunció que multaría a las tres empresas y a nueve personas físicas por incurrir en prácticas monopólicas absolutas por  313 millones 473 mil pesos. Hasta ahora, las autoridades no han recibido impugnaciones por la medida impuesta.

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Las reuniones secretas de Kimberly Clark

KCM realizó reuniones secretas con las otras empresas para establecer acuerdos y fijar los precios de los productos ya mencionados.

La empresa y Claudio X. González Laporte incurrieron en ese delito, a pesar de que obtuvo un subsidio de 36 millones de pesos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) con Calderón.

En este sentido, la Cofece reveló que posee correos electrónicos y llamadas telefónicas que demuestran la coordinación entre las empresas. Asimismo, señaló que los implicados sabían que era necesario mantener su comunicación en secreto porque sabían de la «ilegalidad de sus actos».

Para los pañales, la fijación de precios ocurrió entre febrero de 2008 y hasta junio de 2014; mientras que en los de higiene menstrual fue desde septiembre de 2011 y hasta junio de 2014.

Por el daño que provocó en los consumidores, la Cofece determinó que se impondría la multa máxima posible, en apego a la ley de competencia aplicable.

¿Cómo realizó la investigación la Cofece?

La Comisión Federal detectó las prácticas ilegales por los monitoreos que realiza de forma constante. De esa forma encontró que las empresas y los actores sancionados se coludieron e intercambiaron información para incrementar precios y eliminar promociones de productos de higiene.

Al respecto, la Cofece informó a SinEmbargo que Kimberly Clark y sus aliadas elaboraron matrices de precios que llenaban con información de cada compañía; igual que con datos que obtenían de empresas que realizaban estudios de mercado.

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Con base en esa información y a partir del establecimiento de índices se establecían los incrementos por cada unidad. Por lo que los montos que se cobrarían según la cantidad de productos que contenía cada empaque.

Por lo regular tomaban como punto de partida el producto con mejores características y que tenía más ventas en cada segmento. A partir de ese producto, se le asignaba un puntaje, que iba decreciendo en función de sus características y calidad.

Aunado a ello, acordaron limitar y eliminar promociones que resultarían en bajas de precios en fechas específicas.

La Ley Federal de Competencia Económica advierte que estas prácticas son ilegales; sin embargo, es común que los agentes económicos incurran en ellas y tratan de ocultar la comunicación que establecen entre ellas.

A causa de estas actividades ilegales, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) se encargará de cobrar las multas que la Cofece impuso.