“Las incertidumbres siguen vigentes por las políticas de Trump y por la posibilidad de que de las elecciones presidenciales de México emerja un líder menos acomodado a los intereses de Washington”, enfatiza el Washington Post. Los comicios mexicanos de acuerdo con el diario estadounidense podrían cambiar radicalmente la relación con el gobierno de Trump.
Regeneración, 02 febrero 2018.- El diario The Washington Post documentó que de las 12 veces que el Secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, viajó el año pasado en aviones de la Marina a la capital de Estados Unidos y pese al acceso que tiene a la Casa Blanca y a la frecuencia de sus visitas; no ha logrado nada concreto en beneficio de los intereses mexicanos.
En medio de la visita Rex Tillerson, Secretario de Estado en el gobierno de Donald Trump a la Ciudad de México, el diario estadunidense destacó en un artículo publicado este jueves, que hay “un alto nivel de angustia” por la visita del encargado de la política exterior de Washington.
Los ataques y descalificaciones de Trump a México y a los mexicanos, como declarar recientemente que el país es el “más peligroso del mundo” y que sus ciudadanos son violadores, narcotraficantes y criminales, prueban el fracaso de Videgaray en sus viajes a Washington en los que precisamente según el Washington Post, busca atenuar la retórica trumpiana.
“La relación de Videgaray con altos funcionarios de Estados Unidos, incluyendo al general John Kelly, jefe de gabinete de la Casa Blanca, ayuda a que en el gobierno estadunidense le abran las puertas a los funcionarios mexicanos”, indica el despacho del Post que inmediatamente agrega: “El año pasado Videgaray realizó 12 viajes a Washington, regularmente viajando en un avión de la Secretaría de Marina y Armada de México (Semar) que aterriza en un hangar privado en el Aeropuerto Internacional de Dulles”.
El miércoles 31 de enero el canciller mexicano estuvo en la capital de Estados Unidos. En un escueto comunicado la Secretaría a su cargo notificó que su titular se reuniría con Kelly y con Jared Kushner, el asesor presidencial y yerno de Trump.
Como ya es costumbre en Videgaray, no informó a nadie de lo que habló con los asesores de Trump, tal y como si su visita fuera privada o personal y no a nombre de los mexicanos.
En lo que va de este año esta es la segunda ocasión que Videgaray visita Washington y se reúne con los mismos funcionarios, eludiendo casi siempre reunirse con Tillerson, su homólogo en el gobierno de Trump.
Funcionarios mexicanos que hablaron con The Washington Post bajo la condición del anonimato, expresaron que gracias a la constante presencia de Videgaray en Washington, el canciller “tiene las llaves de oro para entrar a la Casa Blanca”, lo que le permite intentar contener las tensiones con Trump, quien insiste en deportar de Estados Unidos a los mexicanos inmigrantes indocumentados, construir el muro fronterizo, y mantiene la amenaza de anular al TLCAN.
“Otros dicen que el acceso que tiene el gobierno de México (Videgaray) a la Casa Blanca, hasta ahora no ha ganado nada concreto”, concluye el influyente rotativo de los Estados Unidos.
Haciendo un recuento de los viajes de funcionarios mexicanos a Estados Unidos, y los del gobierno de Trump a México, el periódico destaca que en un año los primeros lo han hecho en 33 ocasiones, y los segundos en 12; sin contar la presencia de Tillerson en la capital mexicana este jueves 1 y viernes 2 de febrero.
“Las incertidumbres siguen vigentes por las políticas de Trump y por la posibilidad de que de las elecciones presidenciales de México emerja un líder menos acomodado a los intereses de Washington”, enfatiza el Washington Post.
Los comicios mexicanos de acuerdo con el diario estadounidense podrían cambiar radicalmente la relación con el gobierno de Trump.
“Andrés Manuel López Obrador, candidato izquierdista, encabeza las encuestas de preferencia electoral y, José Antonio Meade, el candidato del partido gobernante (PRI) ha estado colocado en el tercer lugar de las encuestas de preferencia”, acota el Washington Post.
Con información de The Washington Post