* La Organización de las Naciones Unidas conmemora hoy el Día Internacional de la Lengua Materna
* Es urgente modificar el modelo de desarrollo económico, para implantar un modelo razonable que no devore ni lastime la dignidad de los pueblos indígenas
* Poco esfuerzo por conservar las lenguas maternas de México; se están desvaneciendo, su uso ya no es tan común en las sociedades indígenas
Regeneración, 21 de febrero 2013. El Día Internacional de la lengua materna se ha celebrado cada año, desde febrero de 2000 para promover la diversidad lingüística y cultural y el multilingüismo. En México cuatro lenguas son las de mayor número de hablantes: náhuatl con un millón 376 mil hablantes, maya con 759 mil, mixteco y zapoteco con más de 400 mil hablantes. De ahí las otras veintidós restantes, no rebasan cada una los mil hablantes. Lenguas como el mixteco y cuicateco les queda menos de 50 años de existencia. En términos generales de las 21 lenguas que la Unesco ubica como críticamente amenazadas en México, hay cinco que están en situación verdaderamente terminal según los datos de la agencia (que en muchos casos datan del año 2000). Según el atlas, sólo quedaban 21 hablantes de ixcateco o xwja, en la localidad de Santa María Ixcatlán, Oaxaca.
“Una causante es la discriminación en el país, en un diagnostico cualitativo el 40% de los indígenas denuncia la discriminación de la que son objeto”, esencialmente por hablar su lengua materna, por su forma de vestir y por las diferencias culturales. Debido a esta tendencia las lenguas originarias están perdiendo terreno, por la falsa idea de ser consideradas como atraso, orillando a muchos indígenas a olvidarse de sus raíces, ocasionando la ruptura intergeneracional de trasmitir la lengua.
Otro factor es el sistema educativo orientado a una homogenización en el desarrollo, con esta propuesta; las lenguas indígenas se convirtieron en obstáculos. La tendencia monocultural de inclusión, que la final acaba creando los estereotipos negativos.
La conservación de las lenguas indígenas es importantísima “para vivir en armonía interna”. Los mexicanos deben considerar a las lenguas indígenas como parte de la identidad nacional y ayudar en la construcción de una nación multicultural y multilingüística.
Es urgente y necesario modificar el modelo de desarrollo económico, para implantar un modelo razonable que no devore ni lastime la dignidad de los pueblos indígenas.