Las potencias mundiales reafirmaron el sábado su apoyo a los esfuerzos para combatir el calentamiento global, con lo que se alinearon contra el presidente estadounidense Donald Trump en materia de cambio climático.
Regeneración, 8 de julio de 2017.- La declaración final de la cumbre del Grupo de los 20 en Hamburgo, Alemania, destacó que los demás países y la Unión Europea apoyaron el acuerdo climático de París rechazado por Trump. Dijeron que el acuerdo para reducir los gases de invernadero era «irreversible» y se comprometieron a aplicarlo rápidamente y sin excepciones.
Los demás países, tanto las potencias europeas como las economías emergentes y las productoras de combustibles «tomaron nota» de la posición estadounidense, a la que se dedicó un párrafo aparte que como aclaró la canciller Angela Merkel, anfitriona del encuentro se aplicaba solamente a Estados Unidos.
«Dijo que la posición de Washington era «de lamentar», pero que la cumbre había logrado «buenos resultados en algunas áreas», como un trabajoso acuerdo sobre comercio que sí incluye a Trump y Estados Unidos.
En cuanto al comercio, se mantuvo la condena del G20 al proteccionismo, una declaración central de los esfuerzos del grupo para combatir la crisis financiera global y las secuelas de la Gran Recesión.
Sin embargo, se agregaron nuevos elementos: que el comercio debe ser «recíproco y mutuamente ventajoso» y que los países pueden recurrir a «instrumentos legítimos en defensa del comercio» si se aprovechan de ellos.
Esto refleja las inquietudes expresadas por Trump durante la cumbre del G20, la primera a la que asiste. Dijo que el comercio debe ser justo además de abierto y debe beneficiar a empresas y trabajadores estadounidenses. Ha apuntado a las relaciones comerciales con países que tienen grandes superávits con Estados Unidos, o sea que venden más a los consumidores estadounidenses que lo que compran a las empresas del país.
Sin embargo, funcionarios de la Unión Europea señalaron que el lenguaje de la declaración no se aparta del sistema global vigente, que permite a los países tomar medidas defensivas dentro de la Organización Mundial de Comercio. Estos incluyen aranceles a la importación para compensar prácticas desleales como subsidios oficiales o precios por debajo del costo.
En materia climática, los funcionarios elaboraron una declaración aclaratoria en tres secciones que todos pudieron firmar. La primera es el compromiso de combatir el cambio climático en general; la segunda es el párrafo especial que reconoce que Estados Unidos no apoya el acuerdo de París; en la tercera, los 19 países restantes ratifican su apoyo al acuerdo.
Los resultados de la cumbre no son decisivos, sea en comercio o en clima. El compromiso de no protección ha sido violado con frecuencia mediante recursos difíciles de detectar como exenciones impositivas en lugar de los impuestos sobre la importación. Por otra parte, la falta de acuerdo sobre clima no impide a los países avanzar en las metas de París e incluso superarlas. Además, los estados y las empresas de Estados Unidos pueden tratar de reducir las emisiones por su cuenta.
Con información de: El Financiero