La historia de la tecnología que solemos recordar es la de los éxitos, la de los productos que consiguieron cambiar el mundo. Pero esa historia también se escribe gracias a otros que, ya sea por estar demasiado adelantados a su tiempo o por tratarse de pésimas ideas, fracasaron de manera estrepitosa. Son estos.
Windows Vista
Es el patito feo de todas las versiones de Windows (y eso que al que aquí suscribe en su momento le gustó) y uno de los fiascos más sonados de la historia reciente. Siendo algo justos, Vista no estaba tan mal y además llegó con la delicada tarea de sustituir al celebérrimo Windows XP, que Microsoft prolongó durante 6 largos años (probablemente el auténtico error). También se hizo un esfuerzo por solucionar varios de los fallos más importantes del lanzamiento, pero el daño ya estaba hecho.
Para bien o para mal, fue sustituido en 2009 por Windows 7.
iTunes Ping y Apple Maps
El iPod, el iPhone y el iPad han sido algunos de los productos tecnológicos más exitosos de la primera década del siglo XXI. Junto a ese éxito también está el fracaso de algunos productos como Apple Maps y Ping, el primer y fallido intento de red social de Apple.
Apple Maps fue lanzado en 2012 junto con iOS 6 y el por aquel entonces nuevo y flamante iPhone 5. La idea era plantarle cara a Google Maps, que hasta ese momento venía preinstalado en iOS, y lanzar una alternativa propia. Pero no funcionó. Los mapas de Apple eran más limitados, les faltaba información importante como el transporte público (les sigue faltando, de hecho) y estaban plagados de errores e imprecisiones. Exactamente lo opuesto que unos mapas deberían ser. Apple pidió disculpas y la cabeza de su principal responsable, Scott Forstall, rodó por los suelos.
El otro ejemplo es Ping. Desde el primer momento también generó bastantes dudas y críticas. La idea, que no era del todo mala, consistía en un servicio de recomendación de artistas paralelo a Twitter y Facebook. Pero fue un fracaso, se llenó de spam rápidamente y los intentos por generar comunidad fueron infructuosos. Murió en 2012 cuando se sustituyó con la integración de redes sociales.
El mes que viene podría volver, de algún modo, con Beats Music y el nuevo servicio de streaming propio de Apple.
El HD DVD
Corrían los inicios del siglo XXI y varios fabricantes luchaban denodadamente por encontrar e implementar un sucesor al popular DVD. Los principales contendientes eran el HD DVD y el Blu-Ray. El asunto se polarizó aún más cuando Microsoft apostó por el HD DVD para su Xbox 360 y Sony por el Blu-Ray para PlayStation 3. Murió en 2008, y nadie lo echó mucho de menos.
Google Wave
Fue apodado como “el sucesor del email”. La idea era distribuir el correo en “waves” que permitían el trabajo de manera colaborativa de manera similar a cómo lo hace ahora, por ejemplo, Trello. La idea no era mala pero cayó pronto en el olvido y fue discontinuado apenas un año después de presentarse.
Microsoft Zune
Antes del iPhone, el iPod era la niña de los ojos de Apple, un éxito rotundo en todo el mundo y la envidia de varios competidores. Entre ellos Microsoft, que se atrevió con su propia apuesta de reproductor MP3 y lanzó el Zune. No era para nada un mal producto, pero carecía del look and feel, la imagen de marca y la facilidad de uso del iPod. Llegó a tener varias versiones pero nunca funcionó del todo. El estilo visual de su interfaz, eso sí, fue el que luego heredaría Windows Phone. Sirvió de algo, supongo ¯\_(ツ)_/¯.
BlackBerry PlayBook
Ocurrió algo parecido al Zune. Corría 2011, el iPad llevaba apenas un año en el mercado, era un éxito y BlackBerry, que ya comenzaba a tambalearse como consecuencia de iOS y Android, quiso subirse al carro. El resultado fue la BlackBerry PlayBook. Tenía algunas ideas interesantes, sobre todo a nivel de interfaz con una multitarea espléndida pero no fue suficiente. En su carrera hacia al fracaso compitió con la TouchPad, de Palm (posteriormente HP).
Segway
Un artículo en TIME de 2001 lo definió como “reinventando la rueda”. Se llegó a decir incluso que el diseño de ciudades cambiaría para hacerle hueco. Ni mucho menos. Era caro, torpe según que circunstancias y de todo menos un ejemplo de buena movilidad urbana. Ahora ha encontrado su hueco en oficinas turísticas y agencias de seguridad, pero no mucho más.
Minidisc
El Minidisc fue al CD, con algunas diferencias, lo que el HD DVD al DVD: un intento de dar un giro de tuerca innecesario y que aburrió pronto. Entre esas diferencias se encuentra el hecho de que a diferencia del HD DVD sí que fue un éxito rotundo en un mercado concreto, Japón. En el resto del mundo fue ignorado. El último reproductor compatible, como dato adicional, dejó de ser distribuido por Sony hace relativamente poco, en 2013.
Betamax
El Betamax fue el primer exponente de la “guerra de formatos” que luego vivirían después HD/DVD y BluRay. Tuvo algo más de éxito, pero después de varios años tuvo que ceder ante el VHS. Una lástima.
Nintendo Virtual Boy
En una época en la que el Oculus y otros sets de realidad virtual se perfilan como el futuro del videojuego y otras formas de entretenimiento resulta curioso ver el primer intento más o menos serio de Nintendo en la materia. Se llamó Virtual Boy y el fracaso rotundo que experimentó en Japón y Norteamérica frenó su expansión a otros mercados.
Recuerdo verlo de pequeño y alucinar completamente. Ahora, 20 años después, sigue siendo objeto de deseo aunque por motivos bien distintos.
Microsoft Kin
“Tenemos que hacer un teléfono con lo mejor del iPhone y lo mejor de BlackBerry”. Una frase parecida debió pronunciarse en la reunión interna de Microsoft que acabó dando lugar a Kin. Fue un fracaso tan grande que duró solo 48 días en tiendas. Más tarde, ese mismo año, Microsoft presentaría una apuesta más seria en materia móvil que es lo que hoy conocemos como Windows Phone.
HTC ChaCha y HTC Flyer
Lo primero era un intento de BlackBerry extraña lanzada en conjunción con Facebook (tenía un botón dedicado) y lo segundo una tableta ridículamente cara con un stylus propio destinada a competir con el iPad. HTC se olvidó pronto de ellos, por suerte.
Internet Explorer 6
Lento, poco usable, con eternos problemas de seguridad y una falta de respeto absoluta por los estándares web. Para hacer más sangre en la herida, se convirtió en un navegador terriblemente popular. Microsoft aplicó sucesivos parches sobre el engendro pero el daño ya estaba hecho.
Con el tiempo, el fiasco de Internet Explorer 6 se convirtió en un meme de internet y levantó tan mala imagen en torno al nombre que años más tarde Microsoft ha tenido que renombrarlo.
Apple Newton y Pippin
Newton, concebida en Apple antes del regreso de Jobs en 2007, fue una especie de aparato intermedio entre el PDA y lo que más tarde sería el iPhone y el iPad. No era un mal producto y de hecho algunas de sus funciones, como el reconocimiento de escritura, eran bastante avanzadas. Llegó a aparecer en una película de Steven Sagal, en la que el actor lo utilizaba para hackear el sistema informático de todo un tren. El delirio:
Apple Pippin, en cambio, fue un intento por hacer una videoconsola que actuase a la vez de centro multimedia y reproductor (lo que consolas como la Xbox One intentan hoy también, irónicamente). El plan de marketing fue un auténtico desastre y pronto murió, ahogada por la competencia.
(vía Gizmodo)