Por Jenaro Villamil | Homozapping
Regeneración, 17 de julio 2014.–Más de un 60 por ciento de los mexicanos está a favor de una consulta popular en materia energética y el 50 por ciento considera que se debe modificar la reforma constitucional en materia de hidrocarburos y electricidad aprobada en diciembre de 2013, según los resultados de la Sexta Encuesta Nacional realizada por la empresa GEA-ISA, en la vivienda de una muestra de mil personas en junio de este año.
De acuerdo a los resultados, la reforma energética es una de las que peor percepción pública tiene: el 65 por ciento está a favor de una consulta popular sobre los cambios, contra el 17 por ciento que cree que no es necesaria y un 18 por ciento que no sabe.
El 50 por ciento opina que se debe quitar la reforma constitucional en materia energética, aprobada en diciembre de 2013, mientras sólo 22 por ciento la apoya y 28 por ciento no sabe.
Ante la pregunta, ¿cómo cambiarán las cosas con la reforma energética? El 31 por ciento opinó que será “para mal”, el 21 por ciento que “no cambiará”, el 20 por ciento que “no sabe” y sólo el 28 por ciento, menos de la tercera parte, considera que los cambios serán “para bien”.
La percepción negativa se incrementa ante la pregunta: ¿A usted y a su familia qué tanto le perjudicará la reforma energética? El 36 por ciento opinó que será “para mal”, el 21 por ciento consideró que será “benéfica”, el 16 por ciento que “no afecta” y 27 por ciento que “no sabe”.
La reforma energética fue una de las más publicitadas el año pasado a través de millones de pesos en spots televisivos y radiofónicos, desplegados en prensa, espectaculares e intervenciones de los distintos involucrados.
En contraste, la percepción sobre la energética es peor que la educativa y la de educción. Sólo 10 por ciento de los consultados consideró que es la más importante, frente al 39 por ciento que opinó que la educativa es la más importante y sólo 3 por ciento consideró que era la de telecomunicaciones.
Esta misma encuesta, levantada entre el 6 y el 8 de junio, arrojó un 54 por ciento con opinión “desfavorable” al gobierno de Enrique Peña Nieto, contra un 38 por ciento “favorable” y el 33 por ciento calificó como “mala” la gestión peñista, frente al 31 por ciento que la consideró “buena”. El 54 por ciento opinó que la situación económica es mala, contra sólo 12 por ciento que la consideró buena.