Julián Ríos es un joven quien junto con tres compañeros creó un dispositivo con el que se puede detectar el cáncer de mama de manera más eficiente y fácil.
Regeneración, 20 de marzo de 2017.- Julián Ríos, un joven de 17 años creó un dispositivo con biosensores que permite diagnosticar el cáncer de mama con mayor facilidad.
El chico, junto con tres de sus compañeros de la preparatoria del Tecnológico de Monterrey, idearon una manera más efectiva para estudiar los senos que registra las temperaturas anormales que se dan en ellos por la presencia de quistes, calcificaciones y tumores malignos y que de manera sencilla e indolora pueden hacer diagnóstico.
La idea surgió en Ríos luego de que su madre padeciera en dos ocasiones cáncer de mama, “la mastografía y la autoexploración, a pesar de que son métodos con virtudes, tienen fallas importantes, que pueden poner en riesgo la vida de cualquier persona”, afirmó.
El dispositivo se llama EVA y es desarrollado por una empresa que él mismo creó de hombre Higia; y el dispositivo se puede usar en un sostén cualquiera o en uno que ha creado específicamente la empresa.
De acuerdo con Higia, el algoritmo tiene una eficacia en el diagnóstico del 93 por ciento, “que es bastante elevado en comparación de otros elementos como la exploración y el ultrasonido, que oscilan entre el 20 y el 50 por ciento”, dijo Ríos.
Este pequeño aparato, monitorea la teperatura durante un mes y con ello le es factible hacer un diagnóstico aproximado; según Ríos fue ideado para que pueda ser usado en diversos lugares sin la necesaria presencia de un oncólogo, pues no todas las comunidades tienen uno.
“En las comunidades rurales no hay oncólogos”, así que si fuera imprescindible un médico, “no lo puedes llevar (el dispositivo) a los lugares que más lo necesitan”, argumentó Ríos, quien también señaló la falta de radiólogos y tomógrafos en México.
El invento podría ser comercializado por un precio de aproximadamente 2 mil 500 pesos, pero aún está en etapa de autorizaciones y se espera que para finales del 2018 se consiga salir al mercado.
Vía Mundo hispánico y EFE