Mexicanos cada vez consumen menos tortilla por crisis

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Regeneración, 11 de febrero del 2016.– Los mexicanos dejaron de comprar 45 kilos 200 gramos de tortilla en los últimos 33 años debido a la pérdida del poder adquisitivo con relación al salario mínimo, de acuerdo con datos del Centro de Análisis Multidisciplinario de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM).

El análisis del CAM detalla que, al 1 de enero de 1982, se podían comprar 50 kilos 910 gramos con el salario mínimo de ese entonces. A la fecha, con la inflación y el alza del dólar, se pueden adquirir 5 kilos 820 gramos con una remuneración diaria de 73.04 pesos, según datos de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), y un costo ponderado por kilogramo de tortilla de 12.54 pesos hasta finales de enero de este año.

Actualmente el precio de la tortilla, un alimento básico en la canasta alimentaria de los mexicanos, oscila entre los 10 y los 18 pesos, dependiendo la zona geográfica. Mientras en Hermosillo, Sonora, alcanza el costo más elevado, en Pachuca, Hidalgo, o en Tlaxcala, Tlaxcala, se mantiene el más bajo.

La tortilla es uno de los productos a los que las familias mexicanas destinan más recursos. Su consumo concentra 8.3 por ciento del gasto en alimentos, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Por su parte, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) estima un consumo per cápita nacional de 57 kilogramos de tortilla en México.

Sin embargo, el salario no se incrementa proporcionalmente como el precio de mercancías, como la tortilla.

De acuerdo con el reporte de investigación 122 del CAM, en 1982 se podían adquirir cantidades mayores de una diversidad de productos, mientras que con el salario actual se puede adquirir una menor cantidad de estos, pese a ser parte del consumo y la salud de las familias mexicanas. Significa una pérdida del poder adquisitivo del salario del 79.21 por ciento.

El informe expone que la tortilla (alimento tradicional y primordial de la nutrición en México) ha disminuido considerablemente su consumo, debido al incremento de su precio con relación al aumento del salario. Tan sólo en 10 años (de 2005 a 2015), la tortilla ha tenido un incremento de 92.9 por ciento.

Durante enero de 2016 y los primeros días de febrero, el precio de la tortilla ha mostrado un incremento en algunos establecimientos del país. La diferencia entre el costo más bajo al más alto es del 80 por ciento.

De acuerdo con Antonio de la Torre, dirigente de la Unión Nacional de Industriales de la Masa y la Tortilla (UNIMT), las causas de aumento en el precio de la tortilla obedecen a un desorden de la industria, provocado principalmente, por las empresas que controlan gran porcentaje del mercado y por una falta de voluntad política de los tres niveles de gobierno.

Explicó que el aumento que empezó a mediados de diciembre de 2015, detonado por el aumento en el precio de la tonelada de maíz a nivel nacional.

En entrevista para SinEmbargo, el líder industrial recordó la situación que se vivió en 2007, año en el que el kilo de tortilla comenzó a aumentar. Explicó que en ese entonces los diferentes integrantes del sector negociaron con la Secretaría de Economía para el otorgamiento de subsidios que pudieran frenar el aumento y se crearon programas como ProHarina y ProMasa, que funcionaron de 2009 a 2012, año en que la misma Secretaría truncó los apoyos al argumentar que ya no había condiciones para continuar con los apoyos.

De 2012 a la fecha se deslindaron del tema.

“A partir de 2012 el subsidio quedó trunco, porque la Secretaría, a pesar de que metimos documentación, dijo que ya no había condiciones para seguir dando ese apoyo y quedó pendiente. El tema actual es similar a ese. Hay una especulación en los precios del maíz. En 2015, en Sinaloa lo compramos en 3 mil 800 la tonelada y desde hace 15 días, de un día para otro, se nos informa que el precio del maíz será de 4 mil 500 pesos”, comentó De la Torre.

El grano de maíz blanco, que es el principal insumo para la producción de la tortilla, ha sido víctima de la especulación de los mercados internacionales, derivado del nerviosismo ante el bajo crecimiento mundial y la fortaleza del dólar frente a otras monedas emergentes.

Es decir que el maíz al ser un commodity está tasado en dólares, lo que generó un incremento en su valor.

Las entidades que no son productoras netas de maíz tienen que importar el grano de Estados Unidos, por lo que un dólar más alto impactó. Apenas este miércoles, el billete verde alcanzó una cotización de 19.23 pesos por uno en ventanillas bancarias, mientras el interbancario cerró en 18.8755 unidades a la venta, según datos del Banco de México (Banxico).

El análisis de la Revista de Análisis de Coyuntura Económica, INPC, canasta básica y salario mínimo en México, 2006-2012, detalló que en los últimos meses los fuertes incrementos registrados en los alimentos estuvieron precisamente asociados al aumentos en las cotizaciones internacionales de las materias primas alimenticias.

Sin embargo, esto tiene un impacto en la economía de las familias mexicanas. De acuerdo con una investigación elaborada por el CAM, hubo una contracción de 88 por ciento en el consumo de tortillas en los mexicanos entre 1982 y 2014. Para ese entonces, sólo se podía comprar el 12 por ciento del producto.

El porcentaje cayó en el último año, al poder comprar sólo el 11 por ciento de tortillas de lo que se podía adquirir en 1982.

(Información de Sin Embargo)