Regeneración, 14 de diciembre del 2015.- El Gobierno de México celebrará mañana el tercer concurso abierto a petroleras privadas de su historia con 51 licitantes precalificados para la extracción de hidrocarburos de 25 campos terrestres maduros.
A pesar del abultado número de campos en licitación, el secretario de Energía (Sener), Pedro Joaquín Coldwell, consideró hoy, en entrevista con Radio Fórmula, que lograr la adjudicación de cinco de ellos sería «excelente».
En este tercer concurso tras la apertura del sector a la iniciativa privada luego de casi ocho décadas de monopolio estatal y en el marco de la reforma energética, compiten 33 empresas de forma individual y 18 consorcios, detalló el ministro.
Entre las firmas interesadas sobresale la gran presencia de empresas mexicanas. Es el caso de Carso Oil & Gas, del magnate Carlos Slim.
De hecho, 22 de las 33 que se presentan individualmente son de este país, si bien se encuentran también firmas de origen australiano, canadiense, panameño, colombiano, estadounidense, egipcio o la española Tecpetrol Internacional.
Las compañías que competirán en los 18 consorcios tienen un marcado acento norteamericano.
De un total de 47 compañías: 31 son mexicanas, 7 estadounidenses (1 firma comparte bandera con México), y una es canadiense.
Se trata de la primera licitación en tierra y se llevará a cabo en los estados de Nuevo León (norte de México), donde se espera extraer gas, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco y Chiapas, donde hay campos de petróleo y gas.
«En el pasado los campos estuvieron en producción, hace muchos años, y se presume que hay remanentes de petróleo ahí para que empresas de tamaño pequeño pueden ser rentables», explicó el secretario.
En la presentación de esta convocatoria de la Ronda Uno, en mayo pasado, el Gobierno anunció que por primera vez los campos se darán bajo un contrato de licencia.
Este «establece que el Estado recibirá una proporción de los ingresos brutos de cada proyecto, en la forma de una regalía adicional, que es la variable de adjudicación con la mayor ponderación en la evaluación de ofertas», explicó la Secretaría de Hacienda en un boletín reciente.
Esta regalía adicional, que oscila entre el 1 y el 10 %, a favor del Estado, se calcula en función del ingreso bruto, por lo que los costos de las actividades de exploración y extracción de hidrocarburos no se consideran para su determinación y pago.
Además, el Estado «recibirá ingresos por la extracción de hidrocarburos a través de otros instrumentos contractuales e impositivos, incluyendo entre otros, el Impuesto sobre la Renta y las regalías básicas», puntualizó.
En los dos primeros concursos, celebrados en julio y en septiembre, se adjudicaron el 26 % de los campos a concurso, un resultado «muy bueno» comparado con los promedios internacionales, dijo hoy Coldwell.
En la primera convocatoria para exploración y extracción en aguas someras (poco profundas) se estimó que se asignarían entre el 30 % y el 40 % de las 14 áreas a concurso, pero finalmente quedaron desiertos 12 bloques.
En la segunda fase, que contemplaba la extracción en aguas someras bajo el modelo de producción compartida, se colocaron tres de los cinco bloques a concurso, lo que oficialmente fue considerado como el espaldarazo que necesitaba la reforma energética.
(Agencias EFE – Expansión)