Es esa esencia, es el sabor amargo de la ausencia, es el perfume del recuerdo, en ocasiones dos momentos lejanos simultáneos, una paradoja temporal.
Por Marco Tetsuya Nakamura García
Ayer te observaba en el reflejo cristalino, y sabía que estabas a mi lado.
Hoy te veo como Alicia, al otro lado del espejo, en otro mundo, en otra realidad.
Ayer vi a tus ojos relucientes en una penumbra que nos abrazaba, y ahora miro al cielo donde aún te veo,
entre las estrellas distantes mi mirada se reúne con la tuya,
y nos observamos indirectamente en un silencio profundo, en un silencio negro intenso…
Es esa esencia, es el sabor amargo de la ausencia, es el perfume del recuerdo,
en ocasiones dos momentos lejanos simultáneos, una paradoja temporal.
Y sigue un fuego azul quemándose en la misma obscuridad, en este mundo o en el que nos espera abajo.