La erupción del Volcán de Fuego en Guatemala dejó cientos de personas muertas y otras enterradas, una mujer perdió a 50 familiares, ahora se dedica a buscarlos.
Regeneración, 10 de junio de 2018.- Eufemia García observó cómo el volcán de Fuego, de Guatemala, arrojaba ceniza ardiente y gas sobre su casa, enterrando a su nieto e hijos y a otros de los 50 miembros de su familia, mientras ella huía. Ahora se dedica a buscar sus restos.
Los últimos reportes detallan que 110 personas murieron después de que Fuego estalló el domingo pasado, empujando corrientes de polvo, lava y gas que se desplazaron rápidamente por las laderas del volcán en su mayor erupción en cuatro décadas.
Entre el pueblo que quedó enterrado, Eufemia cree que están sus nueve hermanos y sus familias, así como su madre, sus hijos adultos y un nieto, probablemente convirtiendo a su familia en la más afectada en un desastre que los funcionarios admiten que empeoró por las demoras en las advertencias oficiales.
La aldea de San Miguel Los Lotes, en el flanco sur del volcán, fue casi completamente tragada por varios metros de ceniza, y los esfuerzos formales de búsqueda se han suspendido hasta que el volcán en erupción se estabilice.
“No voy a darme por vencida hasta no tener una parte de mi familia y darle cristiana sepultura», dijo Eufemia García.
Casi sin familia, García aún ignora dónde vivirá o qué hará para sobrevivir, por ahora, dice ella, lo único que importa es la búsqueda.
La mujer marca una lista de sus desaparecidos, incluidos sus tres hijos, su madre, su nieto, hermanos, hermanas, sobrinos, hijos de sobrinos y cuñados, generaciones de parientes entre el grupo de familias que se establecieron en la aldea desde 1970.
Con información de: RT