Una pequeña de 11 años resultó lesionada debido al impacto de una bala pérdida en Sonora, durante la celebración de Año Nuevo.
Regeneración, 10 de enero de 2018.- Una menor de 11 años y una mujer resultaron lesionadas por una bala perdida, en hechos ocurridos por separado durante la celebración de Año Nuevo, confirmaron autoridades municipales.
La menor fue identificada como Estefanía, de 11 años, quien fue impactada por la bala cuando estaba dormida en un colchón en la sala de su casa.
El proyectil la impactó en el pómulo derecho, sin salida, se le alojó cerca del cerebro, por lo que fue trasladada a Hermosillo para recibir atención médica.
La niña recuerda que la noche del 31 de diciembre de 2017 se encontraban haciendo tamales, ella estaba ayudando a preparar la cena familiar y cerca de las 22:00 horas se sintió cansada, por lo que se acostó en un colchón que colocaron en la sala para ver la televisión y luego se quedó dormida.
Su madre escuchó ruidos, gritos, cohetes y disparos, en los últimos momentos del año. Luego de esto escuchó un fuerte ruido en la azotea, como si hubieran lanzado una piedra al techo, su hija Estefania la movía y le decía: “Mami, mami, despierta”.
En el momento en el que abrió los ojos y encendió la luz, la pequeña sangraba por la nariz y la boca: “Yo desesperada la agarré, la senté en el sillón y empecé a hacer miles de cosas, salí corriendo a buscar ayuda, le pedía al cielo que pasara alguien y nadie pasaba, ella me decía mami no salgas te puede pasar algo, yo estoy bien no te preocupes”, narró su madre.
La mujer llamó al número de emergencias, luego enviaron una ambulancia hasta el domicilio, ahí la niña fue atendida por paramédicos de la Cruz Roja, pero no encontraron la bala, por lo que fue trasladada al Hospital General, en donde le tomaron RX y se dieron cuenta que la bala se le había alojado en la cabeza, así lo informa en una nota El Universal.
La mañana del 1 de enero de 2018 llegaron al Hospital Infantil del Estado de Sonora, ahí la niña fue sometida a exámenes y le hicieron cirugía el mismo día. El médico que la atiende consideró que fue un milagro que la niña no haya quedado en coma.
NECESITARÁ AYUDA PSICOLÓGICA
Ahora la pequeña Estafanía necesitará ayuda psicológica, pues tras el accidente se altera incluso con el ruido del agua que sale de la llave. Además dice que escucha voces, pero no distingue bien lo que dicen, y eso nunca lo había sentido, dijo su madre. Además de esto la niña aún desconoce que perdió la vista de su ojo izquierdo.
Según el reporte de C4 (Centro de Comando, Control, Comunicación y Cómputo), en lo últimos minutos del 31 de diciembre y los primeros del 1 de enero de 2018, 11 personas resultaron heridas por balas perdidas en Sonora; cuatro de los lesionados son menores de edad, entre ellos de encuentra Estefanía.