Indicó que con la aprobación de reforma constitucional y las leyes reglamentarias “han desmantelado lo que una revolución logró”. Advirtió que el control de la nación sobre los energéticos no hubiera sido posible sin un gobierno como el del General Cárdenas”.
Señaló además que las leyes aprobadas recientemente atacan todos los logros del movimiento revolucionario del 1910, incluido el tema agrario ya que se pretende legalizar el despojo de las tierras de los campesinos a favor de las transnacionales encargadas de la explotación de los hidrocarburos y de la generación eléctrica, lo que calificó como “un robo en despoblado”.
Por ello, aseguró que por donde se vea a la reforma energética impulsada por Enrique Peña Nieto “le sale pus”.
Asimismo destacó que el gobierno federal y los diputados pretenden una supuesta recuperación económica a partir de la dependencia total de lo que el capital extranjero pueda hacer con los recursos naturales del país. “Es la idea de que el capital extranjero nos va a venir a salvar de nuestro atraso, de nuestras dificultades económicas”.
No obstante, el dirigente de Morena confió en que la consulta popular sea el instrumento capaz de echar atrás la reforma constitucional y las leyes secundarias en materia energética que “se va convirtiendo en un clamor popular”.
Destacó que la colecta de firmas es en esta etapa la movilización social que impulsa Morena contra la aprobación de las leyes secundarias. Adelantó que al momento ha conseguido más de un millón de firmas a favor de la consulta en las 32 entidades de la república. Destacó que en Baja California se ha avanzado más y que Sonora y Baja California Sur van muy cerca de llegar a la meta, así como las entidades de la región centro y sur del país “vamos muy bien”. Por ello se mostró seguro de alcanzar y rebasar el mínimo legal de firmas que se requieren para lograr la aprobación de la consulta.
Anunció que a lo largo del país se han sumado otros actores independientes de Morena que están en interesados en la realización de la consulta, como los miembros de la Coordinadora Plan de Ayala que se sumará a esta tarea.
En este sentido, Francisco Chew, dirigente de esta organización campesina, externó su interés en sumarse a la campaña de colecta de firmas impulsada por Morena y resaltó la preocupación del sector agrario por el ataque a la tenencia de la tierra contenido en las leyes secundarias aprobadas por el Senado de la República “que significan un verdadero despojo que va a afectar a las comunidades campesinas que ya se encuentran en resistencia” ante diversos macro proyectos que no han redundado en ningún beneficio.