Durante su sexto informe de Gobierno, Peña Nieto se dedicó a justificar la falla en la estrategia, para situarlo de ‘algunos rincones’.
Regeneración, 04 de septiembre de 2018.- La percepción de Enrique Peña Nieto está atrofiada, no sólo cree que es más 1 minuto que 5, sino que además se dedicó a presumir logros en seguridad, cuando el país está colapsado por la violencia.
En la columna Serpientes y Escaleras, Salvador García Soto se sorprende de la capacidad de Peña Nieto para no ver lo que está frente a sus ojos, sobre todo el rotundo fracaso de la estrategia de seguridad.
“él no ve un país convulsionado casi en su totalidad por la violencia y el caos del crimen organizado, sino sólo ‘algunos rincones’ de la República en lo que dice que no pudo conseguir la paz que prometió a su llegada al gobierno en 2012.
En el fastuoso evento que organizó para presentar los resultados de su gestión, en Palacio Nacional, no tomó en cuenta que en este sexenio, se alcanzó el récord histórico en homicidios violentos (26 asesinatos por cada 100 mil habitantes), o los 37 mil desaparecidos en el país.
“Ninguna de esas cifras escalofriantes, que nos ubican entre los países más violentos del mundo, aparecieron en el mensaje de ayer del presidente con motivo de su sexto informe; sólo hubo justificaciones como que la violencia, que él logró reducir en los primeros años de su gobierno, resurgió por culpa de los gobiernos locales incapaces de enfrentar a ‘bandas menores’ que surgieron tras golpear a los cárteles’, escribió García Soto.
Durante se mensaje, Peña Nieto dijo que estaba consciente de que no se alcanzó el objetivo de paz y seguridad en “todos los rincones del país, pero a qué le llama ‘rincones’, se pregunta García Soto, pues varios estados en otro tiempo seguros, pasaron a ser bastiones de violencia, como Guanajuato, Colima o Baja California. También otros estados repuntaron su violencia como Guerrero, Tamaulipas, Chihuahua, Jalisco o Michoacán; o lugares donde el “narcoestado” se fortaleció, como en Nayarit, Quintana Roo, Morelos, San Luis Potosí o Zacatecas.
“Inseguridad y control del narcotráfico se fortaleció”, apunta el periodista. “sin duda la geografía nacional y la realidad en la mente peculiar del presidente saliente es muy distinta a la que conocemos el resto de los mexicanos”, señaló el periodista.
Peña Nieto no sólo tiene mala percepción de realidad en violencia, también en todos los demás ejes de los que habló: educación, programas sociales y bienestar social, la «inclusión» de personas indígenas y de bajos recursos, el repunte de la economía, el éxito de las reformas estructurales,