Cada una de las comunidades que se han afectadas por la construcción del nuevo aeropuerto interpondrán amparos para evitar que continúen explotando sus cerros.
Regeneración, 6 de noviembre de 2017.- Cerca de 150 habitantes, representando a ocho municipios, se manifestaron ayer en los alrededores de la zona arqueológica de Teotihuacán para exigir a las autoridades que paren la devastación de 30 cerros de donde se esta extrayendo material pétreo para la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
Los afectados informaron que se darán a la tarea de que cada una de las comunidades interpondrán amparos para evitar que continúen explotando sus cerros y además devastando flora y fauna.
Los pobladores que provienen de los municipios de Temascalapa, Tezoyuca, Acolman, San Martín de las Pirámides, Axapusco, Otumba, Teotihuacán y Nopaltepec, dieron inicio con su manifestación en el circuito que se encuentra atrás de la pirámide de la Luna.
Los manifestantes se detuvieron en cada una de las puertas que dan acceso a las pirámides para alzar la voz e informar sobre su lucha a los turistas que se encontraban ahí, algunos de los visitantes dieron su muestra de apoyo a la protesta.
Gritaron consignas como: ¡Peña Nieto, entiende, los cerros no se venden!; ¡cerros sí, aeropuerto no! y ¡no queremos minas!, los habitantes denunciaron que la explotación de los cerros comenzó hace más de un año para realizar las obras en el NAICM.
AMENAZAN A POBLADORES QUE PROTESTAN POR LOS DAÑOS
“Hemos contado cerca de 30 cerros de distinto tamaño en los municipios de Tezoyuca, Acolman, Teotihuacán, San Martín de Las Pirámides, Otumba, Axapusco y Temascalapa, que están siendo devastados para la extracción de tezontle. Vemos filas de camiones cargados de tepetate y piedras, día y noche”, aseguró Luis David Aguilar Velasco, uno de los pobladores que se han visto afectados.
Destacó que explotar los cerros esta destruyendo zona de recarga de acuíferos, además esta afectando a las viviendas aledañas por el paso de camiones pesados, como en Tezoyuca; ha provocado accidentes carreteros y deterioro de caminos; además, los dueños de la minas han amenazado a los pobladores que protestan por los daños, esto de acuerdo con testimonios que obtuvo La Jornada
“En menos de un año varios cerros desaparecieron. Muchas empresas mineras ni siquiera tienen permisos, mienten a las comunidades, pues se requiere un dictamen, pero las autoridades están coludidas con los empresarios y se hacen de la vista gorda”, expresó.
“Desde hace 10 años diversos grupos, entre ellos el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, se han opuesto a las obras del nuevo aeropuerto; realizaron foros con especialistas para advertir sobre el riesgo de devastación, pero nadie les hizo caso y ahora estamos viendo las consecuencias”, refirió Aguilar Velasco.