Los «poppers» son una droga inhalada y usada como relajante sexual, su efecto relaja los músculos que rodean los vasos sanguíneos, debido a sus compuestos de nitrato de alquilo
Regeneración, 20 febrero 2017.- José Ángel Prado García, especialista de los Centros de Integración Juvenil (CIJ), advirtió sobre gran riesgo en el consumo de «poppers» adulterados, esta droga inhalable adulterada podría ocasionar graves problemas neurológicos y hasta la muerte.
Los «poppers» cada vez más son adquiridos por mayores de 22 años de edad, porque es inhalada y usada como relajante durante la práctica sexual, su efecto vasodilatador relaja los músculos lisos que rodean los vasos sanguíneos, debido a sus compuestos de nitrato de alquilo, comentó el director general adjunto de Operación y Patronatos de CIJ.
Actualmente los “poppers” están más asociados con la palabra sexo que con una droga, antes eran utilizados con fines médicos para prevenir o tratar angina de pecho o infarto agudo del miocardio, comentó Prado García.
Subrayó que esta droga ocasiona dolores de cabeza persistentes, baja presión arterial, taquicardia, mareos, palidez y mayores consecuencias de salud para quienes tienen prescripción de medicamentos antihipertensivos o antidepresivos.
Prado apuntó que comúnmente los «poppers» se pueden encontrar en tiendas especializadas en la venta de artículos sexuales, conocidas como “sex-shop”, e incluso en la calle. Si bien todavía no se han visto otros problemas por su consumo regular, en algunas muestras analizadas en el Centro Toxicológico de Venustiano Carranza detectaron «poppers» adulterados con ácido sulfúrico.
El especialista enfatizó que lo anterior implica mayores riesgos para la salud de los consumidores, sobre todo por la cantidad de dosis inhalada y la sustancia con la que sean alterados, y podría causar quemaduras importantes en las vías aéreas respiratorias altas e incluso hasta la muerte.
García señaló que la falta de estadísticas impide tener un panorama actual de quiénes y cuántos la adquieren para tales fines, empero, estimó que es usada para prácticas sexuales por la vía anal y 20% más por homosexuales.
Pidió a la población evitar adquirir y consumir cualquier tipo de sustancia sin saber su contenido y procedencia. «Es evidente que estas sustancias son vendidas sin ningún tipo de control», el experto consideró que en las escuelas de educación básica y media superior deben brindar mayor información a jóvenes sobre educación sexual y los riesgos de las drogas que circulan en las calles, insistió.
En Europa se ha registrado un aumento en el uso sustancias o estimulantes para el placer sexual, y añadió que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó a países de América Latina tomar precaución porque «la tormenta va hacía allá».
Al ser los «poppers» una sustancia regulada, limita de alguna manera la intervención de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), pero aseveró las autoridades correspondientes realizan operativos por los riesgos que genera a la salud.
Con información de Notimex y El Universal