• El entusiasmo de Antonio Esteban Cruz, ha sido cortado de tajo por quienes han actuado al servicio del gobierno
Regeneración. Junio 5, 2014 Puebla, Pue. (apro).- Antonio Esteban Cruz, líder del Movimiento Independiente Obrero, Campesino, Urbano y Popular (MIOCUP) y opositor al proyecto de construir una hidroeléctrica en el río Apulco, en los municipios de Cuetzalan y Ayotoxco, fue asesinado esta mañana de cuatro balazos.
En un comunicado, el MIOCUP y la Coordinadora Nacional Plan de Ayala-Movimiento Nacional (CNPA-MN) acusaron a los gobiernos estatal y federal de estar implicados en el homicidio de este luchador social, quien también fue uno de los principales coordinadores del Encuentro Nacional Indígena y Campesino “En defensa de la tierra y el territorio”, realizado en marzo en Cuetzalan.
A partir de este encuentro, refieren las organizaciones, se conformó el Frente Indígena y Campesino de México (Ficam) para defender la tierra como un bien colectivo de los pueblos y exigir respeto al derecho a la consulta ante las autorizaciones que ha hecho el gobierno federal de megaproyectos, minas e hidroeléctricas.
“Responsabilizamos del artero crimen de nuestro compañero al gobierno de Puebla que, después de la formación del Ficam, mediante llamadas anónimas hizo amenazas de muerte a varios integrantes de nuestra organización y de otros grupos de la sierra de Puebla”, señala el texto.
Asimismo, responsabilizaron al gobierno federal por su política de imposición de proyectos sin consultar a las comunidades, “así como ante la falta de solución al conflicto agrario del predio Paso María Cristina y a quienes hayan sido usados como instrumento del gobierno para cometer este infame asesinato”.
Antonio Esteban Cruz era uno de los líderes del movimiento opositor al proyecto hidroeléctrico Cuamono, que proyecta construir la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en las aguas del río Apulco en los municipios de Cuetzalan y Ayotoxco, ubicados en la Sierra Norte de Puebla.
De acuerdo con la CNPA y el MIOCUP, el líder náhuatl fue asesinado de cuatro disparos de arma de fuego alrededor de las nueve de la mañana de este miércoles en el paraje El Rincón, a orilla del río Apulco en la comunidad de Cuahutapanaloyan, en el municipio de Cuetzalan.
“La vida del compañero Antonio está llena de lucha y resistencia contra las injusticias a las que han sido sometidos los pueblos indígenas y campesinos de nuestro país. En su condición de indígena náhuatl siempre priorizó la lucha por los derechos de las comunidades”, resaltaron.
“En el marco de las concesiones mineras que el gobierno federal viene autorizando, así como de la imposición de megaproyectos, represas hidroeléctricas y demás proyectos no consultados con las comunidades”, destacaron, Cruz “ha sido un férreo impulsor del derecho a la consulta previa, libre e informada como mecanismo de inclusión de las comunidades indígenas”.
Mientras que el conflicto por el predio Paso María Cristina, ubicado en el municipio de Ayotoxco de Guerrero, explicaron, tiene sus antecedentes desde los años setenta, cuando un grupo de campesinos, encabezados por Antonio Esteban Cruz, disputaron un terreno al cacique regional Hugo Cantellano Gutiérrez.
También recordaron que Cruz fue encarcelado y golpeado varias veces en la década de los setenta y nuevamente, en el 2005, y se mantuvo en la lucha por esas tierras de cultivo “a pesar de los ofrecimientos de traicionar a los suyos y a pesar de las amenazas de muerte de parte de personas allegadas a los grupos de poder de la región”.
En relación con este conflicto, señalaron en el texto, el 22 de junio de 2012 los campesinos indígenas fueron agredidos por un grupo de hombres armados con pistolas y rifles, algunos de ellos vestidos de policías, y este hecho se mantiene impune hasta la fecha.
“Lamentablemente, su entusiasmo (de Antonio Esteban Cruz) ha sido cortado de tajo por quienes han actuado al servicio del gobierno, ya que para nosotros esta agresión se enmarca en la guerra de baja intensidad que el Estado mexicano viene realizando contra el pueblo organizado”.
Asimismo, denunciaron, “de todos es conocido que el gobierno de Puebla que encabeza Rafael Moreno Valle es autoritario, represor y por lo tanto fascista”.
En ese sentido, consideraron que este crimen forma parte de una misma estrategia y está relacionado con las detenciones de Juan Carlos Flores, Enedina Rosas y Abraham Cordero, líderes del movimiento opositor al Gasoducto Morelos, para desarticular las luchas de los pueblos contra los megaproyectos.
Finalmente, las organizaciones exigieron el esclarecimiento del asesinato de Antonio Esteban Cruz, y castigo en contra de los responsables, además de la regularización del predio Paso María Cristina y diálogo inmediato con el gobierno federal.