Reunión en Tapachula de los dos presidentes más populares de América Latina

Reunión en Tapachula de los dos presidentes más populares de América Latina, para firmar acuerdo de cooperación en Centroamérica


Regeneración, 20 de junio de 2019. En la frontera de México, en Tapachula, Chiapas, se encontraron nuevamente el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el presidente de la República del Salvador Nayib Bukele para firmar la Carta de intenciones y el acuerdo bilateral para el desarrollo de la región.
En el encuentro estuvieron presentes también el canciller Marcelo Ebrard y el gobernador del Estado, Rutilio Escandón, quien hizo la presentación de todos los presentes.
El secretario de relaciones exteriores, Ebrard, expresó en términos generales la política para acabar con el rezago social profunda en el sur de país y en centroamérica
Eso se hará realidad a partir de la inversión directa de más de 30 millones de dolares en el programa de cooperación sin precedentes,.
Días atrás, el 30 de marzo, se habían encontrado de igual manera ambos presidentes en el Palacio Nacional de la Ciudad de México. Lugar donde hablaron y acordaron el impulso conjunto del programa sembrando vida. 
Bukele, tras algunas anécdotas del día y halagos a AMLO. Expresó que las fronteras no importan porque «somos el mismo pueblo, hablamos el mismo idioma» por lo que es momento de trabajar en conjunto.
Finalmente AMLO expresó la necesidad de este programa para acabar con el problema de la migración forzada. Resaltó que el hacer un programa de desarrollo integral con el presidente más popular del mundo, sería un gran logro.
Expresó que hay que acabar con la xenofobia, para acabar con el odio a «nuestros hermanos migrantes», tanto el humanismo laico como el cristianismo religioso debe abonar al cuidado de todo ser humano.
Hizo también un repaso de los programas del gobierno, del conflicto con Estados Unidos y del acuerdo que se logró.
Al final del evento ambos presidentes firmaron los acuerdos planteados, y de manera simbólica Ambos presidente sembraron un árbol.
A contiuación reproducimos el discurso completo del presidente slavadoreño Nayib Bukele.

NAYIB BUKELE, PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DE EL SALVADOR:

Realmente, este es un día muy importante por varias razones.
Cuando veníamos en el coche -como dicen los americanos, nosotros le decimos carro- cuando veníamos en el coche con el presidente, había un grupo de gente en la calle, y él decidió pararse a abrir la ventana y atender las solicitudes del montón de gente que estaba ahí.
De hecho, por eso nos tardamos un poquito más, pero había que atender a la gente.
Y luego caminamos, fuimos y al entrar al proyecto había otro grupo de gente, no aquí, al proyecto, y el presidente decidió atender a la gente, escuchar sus peticiones.
Y luego al terminar el recorrido por todo el proyecto, que son como cinco módulos y llegar acá, ya al final de la trayectoria, nos tardamos un poquito en pasar porque el presidente se detuvo a atender a la gente que le solicitaba atención.

Y yo quiero decirles una cosa.

Yo conozco al presidente de antes, por su nombre, etcétera, pero en persona lo he conocido dos veces: la vez que vine cuando ya era presidente electo, pero aún no era presidente;
y ahora, que es la primera vez que vengo como presidente de El Salvador.
Yo estoy seguro de tres cosas, que probablemente el 100 por ciento de los mexicanos pueden ver,
porque aquí algunos pueden estar cegados por ideologías o por partidos y una vez afuera eso no lo ves, porque a mí no me suena nada todo eso, porque yo vivo en otro país.
Este es un hombre que de verdad quiere lo mejor para México y este es un hombre que está trabajando y que su único interés, estoy seguro, es dejar un legado para México.
Y yo sé que los mexicanos lo quieren mucho, pero quiero pedirles algunas cosas también o exhortarlos a algo.
Ya sé que lo quieren mucho, sé que le dicen ‘algodoncito’, pero hay una cosa y es que México tiene 200 años de estar mal, 200 años; ni el más anciano de nosotros estaba vivo cuando México ya estaba mal.

Cuando nació el más anciano de las personas que existen en el mundo,

México ya estaba mal y ahora tienen un lujo de presidente, pero él no va a poder arreglar todas las cosas en seis meses, ni en un año, ni en dos.
Así que apóyenlo, denle tiempo, porque los cambios tardan, los cambios cuestan; y si Roma no se hizo en un día, México tampoco se va a hacer en un día.
Pero ustedes están viendo los cambios, ustedes están viendo los proyectos, ustedes están viendo las cosas, cómo se está enfrentando a muchas cosas que nadie tenía el valor de enfrentarse.

Eso tiene mucho valor.

Les va a costar conseguir otro así. Entonces, apóyenlo.
Y algo bien importante. Cuando me explicó este programa, que me lo explicó allá en Palacio, no aquí en el campo, él me lo contó tan bien, es como que estuviéramos aquí en Chiapas, pero estábamos allá en la CDMX.

Él se lo podía todo, a dedo; es más, cuando estaban explicando todo, algunos datos no me los podía, pero esos datos él ya me los había dicho allá en Palacio.

Y este proyecto va a ser un detonante, no sólo para Chiapas, sino para todos los estados que va a intervenir, porque no sólo beneficia a las personas que emplea directamente y a sus familias,
sino que es un detonante económico que lo que va a traer es que donde no se ponía atención ahora se está poniendo atención.
Y créanme, sólo el hecho de que un presidente ponga atención en una región,
eso empieza a cambiar mucho, eso empieza a cambiar; es una cadenita, una cadenita de un dominó, que una vez empieza el momento, entonces empieza el desarrollo.
Y lo que el presidente está tratando de hacer aquí es iniciar eso.
Cuando nos invitó a participar y nos ofreció colaborar en que hiciéramos un proyecto similar en El Salvador, a nosotros nos pareció fantástico;
y nos pareció fantástico por el simple hecho de que podemos estar divididos por una frontera,

pero al final somos lo mismo, somos el mismo pueblo, hablamos el mismo idioma.

Ustedes casi no comen pupusas como nosotros comemos tacos, pero créanme, somos el mismo pueblo y es hora de que trabajemos de la mano.
La suma de nosotros es mayor que la suma de nosotros, la suma de nosotros es mayor que la suma de cada uno de sus componentes; porque nosotros no sumamos, nosotros nos multiplicamos.
Y yo estoy seguro de que el bienestar que vamos a traer, no sólo para México, con la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador que además engloba a Honduras, Guatemala, El Salvador.
Eso va a ser un ejemplo, como dijo el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, eso es una luz que va a alumbrar muchas partes del mundo,
porque el ejemplo que estamos dando aquí, el ejemplo que México está dando acá es el ejemplo que necesitan oír en todo el resto del mundo.

Así que humildemente nosotros agradecemos el apoyo de México, queremos decir y ofrecer el humilde apoyo de El Salvador en lo que nosotros podamos apoyar a México.

Estoy seguro que vendrán mejores tiempos para todos, para cada uno de ustedes,
para las personas que nos están viendo y para las personas que probablemente no nos estén viendo en un medio internacional y que no tengan nada que ver con México y nada que ver con
El Salvador, y nada que ver con Guatemala y nada que ver con Honduras; pues vean el ejemplo y vean el ejemplo de cómo hermanos trabajando unidos podemos hacer muchísimo más.
Qué Dios los bendiga a todos.
Muchas gracias.