El futbolista brasileño Ronaldinho pidió este martes terminar con el racismo después de haber sido llamado «simio» hace unas semanas por el panista queretano Carlos Manuel Treviño Núñez.
«No me gustaría hablar mucho porque es algo que duele a todos, independientemente de color, raza y país», señaló
Regeneración, 8 de octubre de 2014.-«Basta, estamos cansados de esto, nadie está de acuerdo», expresó el flamante jugador del modesto club mexicano Querétaro en una rueda de prensa.
Al ser preguntado sobre el episodio que está siendo investigado por el organismo oficial contra la discriminación, Ronaldinho dijo: «No me gustaría hablar mucho porque es algo que duele a todos, independientemente de color, raza y país».
«Estamos de acuerdo en que basta de todo esto», añadió.
A mediados de septiembre, el secretario de Desarrollo Social de la ciudad de Querétaro entre 2006 y 2009, Carlos Treviño, emitió el insulto tras protestar por el caos vial que generó la presentación del astro brasileño en el estadio de esta ciudad a 200 km al norte de Ciudad de México.
«Trato de ser tolerante, pero detesto el fútbol y el fenómeno idiotizante que produce. Lo detesto aún más porque la gente estorba e inunda las avenidas, y tardé dos horas para llegar a casa, y todo para ver a un simio, brasileño pero simio aun», escribió Treviño, del partido Acción Nacional (PAN).
La dirigencia de los Gallos Blancos del Querétaro exigió a las autoridades un «castigo ejemplar» para el exfuncionario, que posteriormente mostró su arrepentimiento y disculpas a Ronaldinho, cuyo fichaje por dos temporadas con el Querétaro ha revolucionado al fútbol mexicano.
El comentario del político generó una gran repulsa entre internautas y algunos futbolistas mexicanos, que se solidarizaron con Ronaldinho con la etiqueta #TodosSomosSimios.
El exjugador del FC Barcelona español y del AC Milan italiano, que fue campeón del mundo con Brasil en 2002, también expresó este martes su deseo de «después de mucho tiempo sin jugar, poco a poco encontrar un gran nivel y poder darle alegría a la afición de Querétaro».