Dolor en Filipinas. Los efectos del tifón ‘Yolanda’ han llevado al Gobierno a decretar el estado de calamidad nacional. Al menos 9,5 millones de personas han quedado afectadas, según Cáritas, que estima que más de tres millones se encuentran en un radio de 30 kilómetros dentro de la ruta seguida por el tifón donde el nivel de destrucción es «máximo» y las comunidades afectadas «carecen de acceso al agua potable, a la comida y a la electricidad».
El Gobierno ha elevado oficialmente a 1.774 las víctimas mortales, aunque se prevé que el número ascienda hasta unos 10.000.
Los equipos de las Naciones Unidas en el terreno han descrito la escena desde el aire como una repetición del tsunami que asoló el Océano Índico en 2004, según apunta Cáritas.
Concretamente, en Tacloban City se registró una subida del nivel de la marea de casi diez metros. Allí, según informa la Iglesia local, se asientan de manera irregular comunidades de migrantes internos que son las más afectadas por la catástrofe y las que necesitan con mayor urgencia ayuda inmediata.
Cáritas informa de que el aeropuerto de esa ciudad se ha despejado, lo que está permitiendo la llegada de suministros de emergencia, pero advierte de que muchas zonas siguen estando inaccesibles.
Además, numerosas islas han sufrido el impacto siendo Leyte y Samar las que han registrado los mayores daños. Algunos informes, según precisa la organización, indican que «el tifón ha dejado, literalmente, una auténtica franja de destrucción a su paso, incluyendo Ormoc City».
«CATASTRÓFICO»
Un equipo de Cáritas Filipinas y miembros de la red internacional presentes en la zona ha llegado este lunes en barco a Leyte para evaluar las necesidades más urgentes. «Todo hace temer que el nivel de destrucción producido por el tifón en las áreas que aún siguen inaccesibles sea catastrófico», apuntan.
El balance oficial de víctimas por el paso del tifón Yolanda por el centro de Filipinas se aproxima ya a las 2.000, según el último dato ofrecido este lunes por el Centro Nacional para la Gestión y la Reducción del Riesgo de Desastres (NDRRMC).
Según ha indicado el portavoz de este organismo, Rey Balido, hasta el momento se han contabilizado 1.774 víctimas mortales -frente a las 255 que había censadas hasta las 6:00 horas del lunes- en todo el país, 1.660 de las cuales se han producido solo en las Bisayas Orientales.
Además, 2.487 personas han resultado heridas y otras 82 permanecen desaparecidas, ha precisado el portavoz y recoge el portal ‘Inquirer’.
AGUA POTABLE Y ALIMENTOS
Según el Gobierno filipino, las prioridades inmediatas, junto a la retirada de escombros, las tareas logísticas y el restablecimiento de las comunicaciones son: agua potable, productos de higiene y saneamiento, alimentos, medicinas y refugio temporal.
Los suministros de ayuda están comenzando a llegar a Tacloban, capital de la provincia filipina de Leyte, tres días después de que el tifón ‘Yolanda’, una de las tormentas más potentes jamás registradas, convirtiera a la una vez vibrante ciudad portuaria de 220.000 habitantes en un vertedero repleto de cadáveres.
El administrador de la ciudad de Tacloban, Tecson Juan Lim, afirma que la cifra de muertos sólo en esa localidad «podría llegar a 10.000», si bien por ahora el balance oficial que maneja el Gobierno filipino no llega a los 2.000.
Al menos una decena de aviones militares de carga estadounidenses y filipinos han llegado a la ciudad el lunes. La Fuerza Aérea filipina ha conseguido trasladar cerca de 60.000 kilos de suministros desde el sábado.
Sin embargo, la demanda es enorme y los suministros no están llegando a los que más los necesitan. «La gente está recorriendo la ciudad, buscando alimentos y agua», ha relatado el rescatista gubernamental Christopher Pedrosa.
Los camiones con ayuda desde el aeropuerto tienen dificultades para entrar en la ciudad debido a la enorme cantidad de vehículos y personas que salen de ella.
Información: http://www.huffingtonpost.es