Twitter presentó este martes una demanda contra el gobierno estadounidense, al que acusa de violar la libertad de expresión por oponerse a que la red social publique cifras precisas de las solicitudes de datos formuladas por el FBI y el departamento de Justicia.
7 de octubre de 2014.-Al suministrar información sobre la amplitud de la vigilancia realizada por el gobierno estadounidense, «nos atenemos a la Primera Enmienda (de la Constitución sobre la libertad de expresión), para responder a las inquietudes de nuestros usuarios y a las declaraciones de funcionarios gubernamentales», explicó el vicepresidente de Twitter, Benjamin Lee, en una nota.
«Deberíamos ser libres (de suministrar esas informaciones) de manera sensata, en lugar de (estar acotados a) un espectro amplio e impreciso», sostiene.
El departamento de Justicia y el FBI se niegan a que Twitter publique en su «informe de transparencia» cifras precisas sobre sus pedidos de datos.
Un acuerdo con cinco grandes grupos de internet (entre los que no se halla Twitter) sólo los autoriza a cifrar sus pedidos de datos en una gama de 0 à 999 o de 1.000 a 1.999.
«Intentamos cumplir con nuestro nivel de transparencia que merecen nuestros usuarios sin recurrir a los tribunales, pero sin éxito», a estimó Lee.
Twitter acusa al departamento de Justicia y al FBI de impedirle incluir en su informe cifras precisas de las cartas del FBI que, en nombre de la seguridad nacional, le reclamaban datos de sus usuarios o de ordenanzas del tribunal secreto Fisc (Foreign Intelligence Surveillance Court).
Twitter considera que esas cláusulas de confidencialidad son inconstitucionales, porque «violan el derecho de Twitter a hablar de temas de verdadero interés general».
(AFP)