El fotoperiodista, asesinado hace un año junto con cuatro mujeres en la colonia Narvarte, concedió una entrevista para Cuerdos de Atar, una organización española que busca hacer periodismo “Sin Filtros” y que reportaba sobre los peligros de ser periodista en México.
Regeneración, 25 de julio de 2016.- A unos días que se cumpla un año de la muerte del fotoperiodista Rubén Espinoza, acontecida el 31 de julio de 2015, el portal Sin Filtros, publicó la entrevista que le hicieron el 14 de julio del año pasado, 17 días antes de que fuera asesinado en la Ciudad de México.
“Estoy tomando una fotografía de un indigente, afuera del metro, que sobran muchos en este país y nadie voltea a verlo. Mucha gente se molesta o ellos mismos que tú vas a sacar dinero de esto, pero pues la realidad es que no lo hago por ese motivo ni tampoco creo que les voy a cambiar el mundo con una fotografía, para bien hacia ellos. Simplemente es algo que me llama la atención y es un registro de lo que tenemos en este país y muchos lados del mundo”, dijo para la cámara.
“En México ser fotoperiodista es en muchos casos la muerte y depende del enfoque tú le quieras dar, lo que quieras ver y decir, conozco mucha gente que trabaja de esto, pero no con el sabor que le debería de poner por el hecho de recibir dinero, sobornos”.
Rubén indicó que aunque recibir sobornos era la manera de vivir de muchos compañeros, quienes no tienen una visión más allá de querer hacer algo, de ponerle voz de alguna u otra manera a un “sin voz”.
Señaló que lo más difícil es cuando la muerte se atraviesa, porque eso sobrepasa cualquier cosa.
Entrevista de Ruben Espinosa, días antes de su asesinato (Video)
“Yo pienso que ya basta de mártires y de héroes, hay que ser humanos y entender que hay cosas que no puedes componer de la noche a la mañana y funcionamos más vivos que muertos”, dijo.
Para él México es un País que ya se derrumbó y en el que hacer periodismo es mortal.
“Me salí de Veracruz, porque no hay condiciones y por antecedentes, como comentaba, 13 compañeros asesinados, 4 desaparecidos y si no me equivoco, del 2000 a la fecha (14 de julio de 2015), 17 exiliados, entonces estamos hablando de no se puede, simplemente no se puede, no estás seguro en tu casa, tampoco, se pueden meter a matarte y nadie va a hacer nada alrededor por temor a perder la vida, entonces es un estado en el cual no existe el estado de derecho y si no hay condiciones”, detalló.
Para él, reportar sobre lo que pasa en la vida cotidiana es fundamental, la realidad que atraviesa.
“Yo pienso que tu realidad, la realidad que vive este País, es la noticia que debes de leer, creer, investigar, indagar, es lo más parecido a tu realidad”, dijo.
Aunque para la fecha de la entrevista, Rubén había perdido su trabajo, su casa y hasta a su perro, tenía claro que lo más importante era conservar la vida.
“No me acoplo, pero que al final del día es vida y si lo veo desde un punto muy realista, soy afortunado al seguir con vida”, declaró.
“Rubén Espinoza no nada más soy yo, Rubén Espinoza es mucha gente, es mi familia, mis amigos, mi perro, pero también está mi seguridad, insisto, sirvo más vivo que muerto”.
Frustrado por tener que salir del lugar donde vivía, Espinoza comentó que parecía que el hecho de cubrir noticias lo convertía en delincuente.
“Yo cubro más movimientos sociales, manifestaciones, cosas ambientalistas, pero es igual que si fuera delincuente, el ejemplo está en que me tuve que salir del estado”.
Pero pese a todo, se sentía optimista.
“Siento tristeza, coraje, temor por mis compañeros, los que se quedan allá, siento temor por mí, pero tengo que seguir haciendo lo que hago, no me puedo callar, espero que muy pronto haya solución para el tema Veracruz”.
En la entrevista, se ve al periodista tranquilo, en las calles del centro de la Ciudad de México, buscando material y tratando de luchar contra la apatía, pese a que su muerte, con un tiro de gracia y signos de tortura, ocurrió hace un año, aún no se ha dado con los responsables.
Vía Sin Filtros