El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, confirmó que en la quinta ronda petrolera se otorgarán contratos para utilizar fracking en Tamaulipas y Veracruz. La Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente autorizó las primeras perforaciones con el argumento de que “no se contaminarán” mantos acuíferos cercanos a las perforaciones
Regeneración, 9 de marzo de 2016. Entre los campos petroleros que se ofrecerán en la quinta licitación de la Ronda Uno, programada para el año entrante, se incluirán algunas áreas contractuales de fracking en la región de Tampico-Misantla, entre Tamaulipas y Veracruz, informó Pedro Joaquín Coldwell, titular de la Secretaría de Energía (Sener).
Para integrar estos pozos petroleros a la quinta ronda todavía falta que se emita el reglamento para que la perforación no afecte mantos acuíferos, por lo que se trabaja con las comisiones Nacional del Agua (Conagua) y Nacional de Hidrocarburos (CNH), aclaró.
En su intervención en una mesa redonda organizada durante el 28 Congreso Nacional de Ingeniería Civil, precisó que los campos de esta región son rentables pese a los bajos precios del petróleo, a diferencia de los que se ubican en la región de Eagle Ford, Texas, en Estados Unidos y donde el costo promedio de extracción es de 60 dólares por barril.
El fracking consiste en la extracción de crudo mediante la inyección a presión de agua, arena y más 750 componentes químicos para fracturar las formaciones rocosas que no tienen poros y por lo tanto no permiten el flujo de los hidrocarburos de forma natural.
Estos depósitos se ubican tierra adentro y tienen una profundidad entre mil y cinco mil metros.
Los primeros pozos de fracking
Además de la inclusión de algunos campos en la quinta y última licitación de la Ronda Uno, el pasado 26 de febrero, la CNH autorizó a Pemex realizar la perforación de tres pozos exploratorios en tierra para obtener petróleo y gas de lutitas en México, a partir del fracking.
En su cuarta sesión extraordinaria de 2016, el órgano de gobierno del regulador precisó que la autorización ocurrió a partir de que la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) aprobó y garantizó que no se contaminarán mantos acuíferos cercanos a las zonas en las que se realizarán las perforaciones.
Los pozos autorizados fueron el Semillal, ubicado en la Sierra de Tamaulipas; el Maxochitl, en Veracruz, así como el Kaneni en Poza Rica, Veracruz, y representan una inversión estimada de 533 millones de pesos.
Estos fueron los primeros pozos de lutitas que se autorizaron en la historia del país y forman parte de las disposiciones de la reforma energética, precisó Sergio Pimentel Vargas, integrante del regulador del sector hidrocarburos.