Además de caer en encuestas, PAN perdería al 50% de sus militantes

Según pronósticos al interior de la institución política, en la restructuración del padrón, entre el 30 y el 50 por ciento de los militantes no se reinscribirán.

 

PAN

Regeneración, 21 de marzo de 2017.- En el proceso de restreucturación del padrón de los afiliados al Partido de Acción Nacional, las cosas no pintan bien, pues se estima que por lo menos 130 mil personas dejen de ser miembros, lo que representa al 30 por ciento del total.

Los cálculos provienen de la Comisión de Transparencia y Reingeniería del Padrón y afirman que pasarían de 480 mil personas a sólo 350 mil.

El mayor hueco sería en la Ciudad de México, donde se espera que al menos la mitad del padrón no renueve su afiliación.

Al parecer, las bases del PAN están llenas de afiliaciones falsas o «de papel», lo que quiere decir que se inscribió a personas que no tenían ningún interés en el partido con el fin de que votaran en los procesos internos de selección de candidatos o dirigentes.

Los responsables de estas inscripciones fueron Santiago Creel, Jorge Romero y Federico Döring; pero con el proceso que se ha implementado en este nuevo padrón, será más difícil que se mantenga el número que se tenía de afiliaciones políticas, pues el militante debe ir al comité estatal o municipal, para inscribirse con huella dactilar y todo; incluso el cómputo irá a los registros del INE.

Así, pues, la picada del PAN en intención de voto también se verá en el número de sus afiliaciones, que tendrán una caída de 50 por ciento en la Ciudad de México, donde se espera que bajen de 33 mil a 16 mil 500; pero en otros estados típicamente panistas como Guanajuato, descenderá un 20 por ciento, para cuando concluya el proceso de refrendo, a mediados de abril.

Pero las afiliaciones de papel no son los únicos problemas del PAN, al interior del partido, algunos culpan al Comité Ejecutivo Nacional del blanquiazul por ello, ya que los sistemas presentaron fallas y no han hecho fácil el proceso para los interesados, los pocos que aún quedan.

Vía La Jornada.