El pesimismo de ejecutivos se ve reflejado en que para este año la media de los pronósticos de crecimiento de la economía mexicana es de 1.5% según una encuesta de Citibanamex, contra un crecimiento de 2.3% del año pasado.
Expansión.-Una buena y una mala: los directores de empresas en México no creen que la economía del país se estanque o caiga en una recesión en este año, pero su nivel de pesimismo es el más alto desde que la consultora KPMG los cuestiona sobre su percepción del panorama de los negocios.
La confianza de los ejecutivos cae al observarse que 64% de ellos espera que la economía mexicana en 2017 será peor respecto a 2016, el porcentaje más alto de pesimismo en los 12 años de la encuesta Perspectivas de Alta dirección en México, en la que para su edición 2017, entrevistó a 868 altos directivos principalmente de los sectores de servicios, manufactura, servicios financieros, consumo, alimentos y automotriz entre otros.
El pesimismo de estos altos ejecutivos se ve reflejado en que para este año la media de los pronósticos de crecimiento de la economía mexicana es de 1.5% según una encuesta de Citibanamex, contra un crecimiento de 2.3% del año pasado.
“La encuesta (de KPMG) muestra claramente incertidumbre, y no hay nada más dañino para una economía que la incertidumbre”, dijo Roberto Cabrera, socio líder nacional de asesoría de la firma de consultoría, quien además agrega en la presentación del estudio que “parte importante de los encuestados se muestran dispuestos a seguir invirtiendo, aunque sea de manera cautelosa, innovando, transformando y creciendo”.
Y es que ante el entorno de pesimismo e incertidumbre, el 64% de los directivos ven un crecimiento de un dígito en sus propios negocios, una cifra igual a la que pronosticaron en 2016, pero solo 5% ve crecimientos de 2 dígitos, mientras que hace un año 18% esperaba este desempeño de sus empresas.
Los menores desempeños de las empresas se basan en que 30% de ellas prevé que su rentabilidad disminuirá con el nuevo gobierno de Estados Unidos, 57% dice que esa rentabilidad se mantendrá y solo 13% espera que se incremente.
Esto se deriva de que algunas industrias encuentran ventajas en la depreciación del peso y la sustitución de algunas importaciones, mientras que otras industrias son afectadas por una contracción de la demanda interna, el alza de las tasas de interés y mayores costos de operación.
Aún con estos elementos 34% de las empresas tiene planes de invertir en Estados Unidos, 24% en Colombia y 14% en Perú, el resto en otros países como Chile, Argentina y Guatemala.
GOBIERNO
Ante estos retos, las empresas dirigen sus estrategias principalmente en reducir costos, incrementar la satisfacción del cliente, innovar, desarrollar el talento y mejorar sus procesos.
De hecho, 63% de las organizaciones antepone el análisis de datos como la iniciativa más relevante en los próximos tres años para mejorar su competitividad, seguida del proceso de innovación y el uso de dispositivos móviles.
Es ahí donde KPMG considera que las empresas pueden aprovechar la incertidumbre generada por Estados Unidos y revertirla al “generar nuevos productos, servicios y prácticas comerciales para sacar partido de las restricciones”.
La encuesta destaca un repunte en la calificación de “pésima” al gobierno, pues 45% de los entrevistados cree que así ha sido el desempeño de los gobiernos estatales y de la Cámara de Diputados, 40% que la de Senadores y 38% ve así de mal al gobierno federal.
Gran parte de esa evaluación se debe a los niveles de corrupción, que es considerada por el 90% de los directivos como la variable que México requiere para incrementar la competitividad, seguida de la estabilidad económica, mejorar la seguridad pública y el estado de derecho.
En tanto que para 45% la inseguridad ha reducido las inversiones de sus empresas en el país, 43% se han mantenido y 3% se han ido a otros países.
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