Nokia 3310 da una verdadera lección de resistencia a los smartphones modernos
(20 de abril del 2017).-Tras preguntarse si está justificada la fama indestructible del Nokia 3310 original, del año 2000, el portal Xataka consiguió uno y lo sometió a un test de cinco grados de resistencia.
Primero, imitaron la caída del bolsillo, desde una altura corta, estando sentados por ejemplo. ¿A quién no le ha pasado? En este caso solamente se le saltó la carcasa, a causa del impacto. En funcionamiento no se vio afectado, ni desde esta altura, ni tampoco desde una mayor (un poco menos de dos metros).
Las escaleras fueron escenario del mayor grado de caída que probaron, con los golpes continuos que esto conlleva. Pero a pesar del gran impacto, el teléfono siguió funcionando después de reiniciado.
Para completar el cuadro de accidentes cotidianos faltaba que alguien, no muy liviano, pisara el Nokia. La prueba de este test quedó plasmada en el Nokia con una huella de la suela del atacante (de 90 kilos). Sin embargo, y más allá del desmontaje de la carcasa y un pequeño «crac», no hubo daños, ni siquiera en la pantalla. El teléfono siguió funcionando perfectamente.
La última prueba incluye agua y no estamos hablando de salpicaduras. Vale destacar que este guerrero del año 2000 no tiene escrito en ningún lado que es resistente al agua. Tras recibir un chorro de agua el 3310 funcionó como si nada y no necesitó un secado previo para seguir activo e incluso recibir llamadas.
Así se confirmó su condición de indestructible.