Un aumento de la radiación de Chernóbil podría tener secuelas devastadoras para el este de Europa, debido a que si las partículas flotan en el ambiente es probable que puedan viajar hacia otras regiones con la corriente natural del aire
Por Martha Rojas
RegeneraciónMx.– El nombre de Chernóbil resuena fuerte a más de 36 años de la fatídica noche en la que un reactor nuclear explotó. El poblado, ubicado a unos 136 kilómetros de la capital de Ucrania, Kiev, ha sido el centro del avance estratégico de las tropas rusas, que hace cuatro días iniciaron una ofensiva contra Ucrania en un intento por detener el avance de la OTAN en la región y apoyar a los ciudadanos independentistas.
Chernóbil fue el escenario de la mayor tragedia nuclear que ha visto el mundo, decenas de generaciones siguen padeciendo los estragos de la radiación liberada durante las pruebas fallidas de un reactor, ahora también es una zona militar estratégica, cercana al río Prípiat, que podría garantizar a los rusos el éxito de su misión.
Por más de una década, las mujeres de Chernóbil se negaron a tener hijos atemorizadas por las deformaciones óseas. En su libro Voces de Chernóbil. Crónica del futuro, la periodista bielorrusa Svetlana Alexiévich – nacida en Stanislav, actual Ucrania- retrata los recuerdos llenos de dolor y nostalgia, así como las secuelas físicas y sociales que dejó aquel incidente en los pobladores y sus descendientes.
El viernes pasado, las autoridades ucranianas reportaron un aumento en la radiación de la zona que atribuyeron a la remoción del suelo contaminado tras al paso de las tropas soviéticas.
Un aumento de la radiación podría tener secuelas devastadoras para el este de Europa. Si las partículas flotan en el ambiente es probable que puedan viajar hacia otras regiones con la corriente natural del aire, pero hasta el momento ningún gobierno del bloque de la Unión Europea ha hablado sobre esa posibilidad. Sus prioridades apuntan al cese de las ambiciones de Rusia como potencia dominante en la región.
Aunque es probable que las tropas de Valdimir Putin no estén interesadas en el control del reactor sino en la zona como paso a Kiev los combates podrían resultar catastróficos para el ambiente.
En Chernóbil -como cuenta Alexiévich- todo quedó inutilizado y sepultado: “Había que disparar a bocajarro. Había un perrito. Un perro de lanas, negrito. Hasta hoy siento pena por él. Llenamos todo un volquete entero, hasta arriba. Y los llevamos a la fosa común. La verdad es que eras un simple agujero profundo; aunque las instrucciones eran cavar de tal forma de tal forma que no se alcanzaran las aguas subterráneas y que el fondo se cubriera con un plástico. Había que buscar un lugar elevado. Pero las órdenes, como comprenderá, no se cumplían”, narran los afectados a la periodista.
DEL TURISMO A LA TOMA RUSA
Desde 2015 y hasta antes del conflicto con Rusia, agencias de viajes ucranianas ofrecían paquetes turísticos a Chernóbil. Eso sí, todo bajo responsabilidad del viajero. Los transportaban desde Kiev hasta la Zona Cero por cerca de 150 dólares. No ofrecían mayor protección que un traje aislador delgado y un dosímetro que mide los curios.
Las agencias de viajes han sabido lucrar con la tragedia, con la morbosidad y las imágenes desoladoras de una ciudad abandonada. La fotografía de una rueda de la fortuna congelada en el tiempo ha dado la vuelta al mundo e incitado a más de uno a viajar al epicentro de la tragedia nuclear.
Ahora, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, espera que la toma de las instalaciones de la antigua planta nuclear, incite a Europa occidental a actuar en su defensa.