Las cifras de Pemex

Por Antonio Gershenson
Gershenson
Regeneración, 22 de marzo de 2015.-El balance anual de las cifras de Pemex nos muestra los resultados de la política vigente, de la administración y de la mentalidad de los funcionario$ de la institución.

Ya habíamos criticado el anuncio oficial de que se va a importar crudo ligero de Estados Unidos. Ya dijimos que para México es absurdo, y los datos anuales lo confirman: la producción de crudo pesado bajó de 2013 a 2014 en 7.3 por ciento. Pero la del crudo ligero aumentó 2 por ciento en ese mismo tiempo. Y la exportación del Istmo, que es ligero, subió en el mismo lapso de 103 a 130 miles de barriles diarios. ¿Cómo se justificaría, como no sea por obedecer al imperio, comprarles lo que nos sobra hasta para exportar?

En cuanto a la producción de gas natural, hemos dicho que es mejor la producción de los yacimientos con gas asociado al crudo, que mayoritariamente son manejados por Pemex como tal, y peores los yacimientos de gas asociado, en su mayoría operados por empresas privadas y en especial trasnacionales. Esto es importante, porque la política oficial es de entregar más y más a las trasnacionales.

Los informes anuales confirman lo que hemos dicho. También entre los últimos dos años completos, la producción del gas asociado, básicamente de Pemex, aumentó 3.3 por ciento. Y la de gas no asociado, básicamente de trasnacionales, bajó 2.9 por ciento. ¡Ese es el progreso que nos ofrecen con la desnacionalización!

Podemos también comparar la producción entre uno y otro años(ver cuadro).

La producción de crudo venía bajando y bajando durante varios años, pero relativamente despacio. La producción de crudo pasó de 2,577 miles de barriles diarios, a 2,429. Fue un 5.7 por ciento de baja en cuatro años, o sea 1.4 por ciento promedio por año. Pero la baja del año 2014 al mes de enero de 2015 fue de -7.3 por ciento. O sea que ya vamos en picada, en ese mesecito baja más que en los cuatro años anteriores de baja juntos.

El precio promedio de exportación de petróleo crudo es previsible. Entre 2011 y 2013 estuvo alrededor de los 100 dólares por barril. El promedio de 2014 ya es de 86 dólares por barril. Y el de 2015, que abarca sólo enero, es de 40.15 dólares por barril.

La exploración está más castigada que la explotación, o sea que se sacrifica más el futuro que el presente. De la información sísmica 2D, más sencilla, en el último año bajó 10.6 por ciento. En la 3D, más completa, la baja fue de 57.3 por ciento.

La perforación de pozos bajó en todos los casos, y esto se suma a la baja en exploración. El número de pozos terminados, de 2013 a 2014 también, bajó 35 por ciento. Los pozos de exploración terminados bajaron de 38 a 24. Y no reconocen que estas bajas cuentan en la baja en la producción de crudo, y en que esa baja sea mucho mayor en enero que antes.

Quieren hacer creer que en sus entregas adicionales a trasnacionales está la solución. Ya vimos que las zonas ya entregadas son las de peor producción, porque a las trasnacionales no les importa la producción sino el dinero que reciben, que se pacta en los contratos y que éstos deben ser, obviamente, a plena satisfacción de la trasnacional.

Para acabarla de amolar, los principales funcionarios no tienen una formación profesional petrolera. Y lo que quieren, ellos también, es dinero, o sea, en este caso, la mordida.

No se requiere el debilitamiento gradual de Pemex, sino, al contrario, su reconstrucción y fortalecimiento.

Con Carmen Aristegui