El Programa Frontera Sur, «cacería humana» contra migrantes

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La actual política migratoria de México en el sur se centra en la detención de migrantes indocumentados y no en el combate a los grupos delictivos que los acechan, denuncian organizaciones civiles.

Regeneración, 30 de julio de 2015.  El Programa Integral de la Frontera Sur es una «cacería humana», denunció la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes (REDODEM).

La Red agrupa a 15 organizaciones y presentó un informe en el que denuncia que la actual política migratoria de México se centra en la detención de migrantes indocumentados, y no en el combate a los grupos delictivos que los acechan.

La hermana Nelly Ríos, de la Casa del Caminante de Palenque, Chiapas, aseguró que el programa dista de cumplir con su objetivo de proteger y salvaguardar los derechos humanos de los migrantes que transitan por el País, así como ordenar los cruces internacionales para incrementar el desarrollo y la integridad de la región.

“La realidad para los que estamos en la frontera con las y los migrantes, es una cacería humana.

“Un plan hecho al vapor que provoca confusión en las autoridades que lo ejecutan”, denunció.

Durante la presentación del informe, el defensor Arturo González señaló que entre enero y julio de 2015, el Instituto Nacional de Migración ha realizado 938 operativos de control y verificación migratoria en el País, lo que significa un aumento de 133 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.

Lamentó que en lugar de que el Gobierno federal implemente el Programa Especial de Migración, elaborado a partir de consultas con expertos y organizaciones de la sociedad civil, ponga en marcha el Programa de la Frontera Sur, enfocado en el control y en el ordenamiento de los flujos migratorios, encima de la protección de los derechos humanos de estas personas y combatir al crimen que los vulnera.

El informe titulado “Migrantes invisibles, violencia tangible” advierte que si bien los flujos migratorios provenientes de Centroamérica no se han reducido, las casas del migrante que los atienden cada vez reciben menos personas, pues el programa fronterizo a cargo de Humberto Mayans ha propiciado la disminución del uso del tren y muchas de las casas y albergues se ubican cerca de las vías.

El documento indica que durante el primer semestre de 2014 las organizaciones atendieron a 21 mil 31 personas, mientras que durante la segunda mitad del año solamente atendieron 10 mil 863, una baja de 48 por ciento, lo que atribuyen a la implementación del Programa Integral de la Frontera Sur.

“Los operativos para evitar que usen el tren han tenido como consecuencia que las y los migrantes se alejen de la red de albergues, casas y comedores para migrantes que se han establecido de manera principal cerca de la ruta del tren.

“Puede leerse como una estrategia del Estado mexicano por desarticular esa red de albergues, con la finalidad de que se reduzca, por un lado, la ayuda humanitaria que desde estos espacios se brinda, y por el otro, para reducir el número de casos registrados de delitos y violaciones a los derechos humanos”, detalla.

Según entrevistas realizadas a los migrantes atendidos, el principal delito que se comete en su contra es el robo, seguido de extorsión y lesiones.

Asimismo, el crimen organizado es el principal actor en la comisión de delitos contra migrantes, con 54.2 por ciento; seguido por particulares, con 25.5 por ciento y por autoridades, con 20 por ciento.