Policías estatales detuvieron vehículos cargados con madera ilegal en Ahuazotepec, pero los talamontes los amagaron con cuernos de chivo. La tala y la apertura de caminos anteceden a la llegada de la minera Almaden Minerals en ese municipio funcionan 25 aserraderos trabajan árboles cortados de manera ilegal.
Regeneración, 31 de marzo de 2016. Ahuazotepec, Puebla. Tres vehículos –entre ellos un tractocamión–, cargados con madera cortada ilegalmente en la Segunda Sección del bosque municipal de Ahuazotepec fueron decomisados por elementos de diversas corporaciones policiacas sin que lograran detener a los choferes, uno de los cuales amagó a los gendarmes con un fusil AK-47, dieron a conocer vecinos y autoridades locales.
Aunque la versión de unos y otras difieren en algunos detalles, ambos declarantes coinciden en que los hechos se registraron a las 14:00 horas del pasado 29 de Marzo, cuando Policías del Municipales interceptaron a un tractocamión marca Internacional de color blanco con rojo, una camioneta de tres toneladas marca Ford de color blanco y una Ranger blanca con franjas negras que transportaban grandes troncos de árboles talados en los terrenos de propiedad pública.
De acuerdo con algunos vecinos, tras la detención de los camiones un hombre bajó de ellos y amenazó a los gendarmes con dispararles con un “cuerno de chivo”, por lo que pidieron refuerzos de los elementos de la Policía Estatal, sin embargo, cuando éstos llegaron al sitio los presuntos responsables del saqueo ilegal ya habían huido.
Las autoridades procedieron a asegurar tanto la madera como los vehículos –todos ellos sin placas de circulación-, que fueron trasladados a un corralón federal ubicado a la orilla de la antigua carretera Tlaxco-Tejocotal, donde permanecen.
Según datos aportados por el secretario general del ayuntamiento de Ahuazotepec, Roberto Cruz Fosado, fue la síndico municipal Gabriela Márquez Ramírez, quien se percató del robo de la madera y pidió la intervención de la policía municipal. “Pero cuando llegaron los camiones habían sido abandonados por sus tripulantes. Ya no había nadie”, aclaró.
Cruz Fosado indicó que el asunto está en manos de las autoridades federales y que ya se inició una investigación para dar con los responsables.
Los aserraderos ilegales preceden en la minera Almaden Minerals
De acuerdo con declaraciones de miembros del Cabildo, en este municipio funcionan unos 25 aserraderos que carecen de permisos o si los tienen trabajan con la materia prima de los árboles cortados de manera ilegal, y están ubicados entre Nanacamila-Atotonilco y los límites de Ahuazotepec con el municipio de Huauchinango.
Indicaron que tal pareciera que en los hechos se quiere liberar los predios de su vocación forestal, con la intención de que tengan vocación minera, ya que en la zona se explota el feldespato, pero también hay una concesión de minería metálica otorgada a la empresa canadiense Almaden Minerals en un terreno denominado Terrerillos.
“Con la tala de la zona, la apertura de caminos y la demolición de algunas rocas, se prepara la llegada al municipio de Ahuazotepec de la minera canadiense para la búsqueda de vetas de plata, indicaron.
Según el Sistema de Información Integral de la Dirección General de Minas de la Secretaría de Economía del gobierno federal, Almaden Minerals tiene la concesión 221140 expedida el 3 de diciembre de 2003 sobre 10 mil 42 hectáreas a través de su filial Compañía Minera Zapata, SA. de CV.
Según los regidores los talamontes trabajan de día y de noche, tanto por la carretera como por los caminos rurales, donde es posible encontrar camiones trasladando madera obtenida de forma ilegal que, seguramente, va a dar a los aserraderos que funcionan de manera irregular.
De acuerdo con sus cálculos en esta demarcación se han talado de manera clandestina un promedio de 35 hectáreas del bosque municipal por año, por lo que sólo quedan 350 de las 700 que había en el año 2005.
El asunto ha sido denunciado ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa).