Defensoras de derechos humanos resisten entre la violencia y el acoso

Sólo en Oaxaca, el año pasado más de 50 mujeres fueron atacadas por oponerse a megaproyectos que traen consigo daños al medio ambiente y al territorio.

Brigadas Internacionales por la Paz señala que las defensoras de derechos humanos se enfrentan a riesgos específicos de género que tienen un impacto diferenciado tanto en sus vidas como en su trabajo.

Defensoras de derechos humanos resisten entre la violencia y el acoso

Edith Peredo

Regeneración, 02 de abril de 2016.- Con la instalación de megaproyectos, las mujeres han tomado roles vitales y de liderazgo en la defensa de su territorio. Sus luchas se han visibilizado a lo largo de América Latina y su vida, se ha puesto en riesgo. Son amenazadas, hostigadas, amedrentadas por grandes consorcios que proyectan construcciones contrarias a la salvaguarda del medio ambiente.

Además, se agrega el que las mujeres defensoras de derechos humanos no cuenten con mecanismos reales y funcionales que defiendan o promuevan garantías básicas para su seguridad.

Las Brigadas Internacionales de Paz (PBI), acompañan a organizaciones y personas defensoras en Latinoamérica, realizan estudios de la situación de las poblaciones que se han visto afectadas por megaproyectos y de la realidad en que viven las mujeres defensoras de derechos humanos.

En su más reciente publicación, “Pienso, luego resisto”, PBI expone que “además de enfrentarse a los mismos riesgos que sus colegas hombres, las defensoras de derechos humanos se enfrentan a riesgos específicos de género que tienen un impacto diferenciado tanto en sus vidas como en su trabajo: acoso, campañas de difamación, agresiones físicas y verbales, amenazas de violencia sexual o muerte, intentos de desalojos forzosos y criminalización, así como ataques y hostigamientos contra sus familias han sido agresiones reportadas en contra de las defensoras que trabajan en temas de defensa de la tierra, territorio y medio ambiente”.

Además, de acuerdo a los datos recabados por el Registro Mesoamericano de Agresiones a Defensoras de Derechos Humanos, tan sólo entre 2012 y 2014, las mujeres defensoras de derechos humanos, sufrieron 525 incidentes que representan el 31% de un total de 1.688 agresiones. Ese mismo registro expone que 7 mujeres defensoras fueron asesinadas.

“La Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras (IM-Defensoras) reportó que en el período 2012-2014 y considerando el acumulado de agresiones para cada país, en Guatemala y Honduras las defensoras más agredidas son las que defienden el territorio y los bienes naturales (40% y 51% respectivamente)”.

El Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad de Género en México, documentó tan solo en Oaxaca y durante 2015, 185 ataques contra 51 féminas. De esa cantidad, 44 son defensoras y siete son periodistas.

Entre los tipos de violencia que se ejercen contra las mujeres defensoras de derechos humanos, se encuentran la violencia sexual, homicidios, desplazamiento forzado, desaparición forzada, amenazas contra su familia y su cuerpo, estigmatización, extorsiones y cooptación de familiares por parte de grupos armados ilegales. Con estas acciones, lo que se busca es sembrar pánico y miedo entre la colectividad y la sociedad, es como un “llamado de atención” para que los demás, no continúen por el camino de la defensoría legal de garantías básicas, tierra, territorio y ambiente.