En 2016 profesores y padres de familia salieron a las calles de Nochixtlan a defender la educación. Sin embargo, el gobierno estatal en contubernio con el federal reprimió violentamente la manifestación.
Regeneración, 19 de junio del 2020. En medio de las protestas por la imposición de la mal llamada reforma educativa promovida por el ex presidente Enrique Peña Nieto. En 2016 en Nochixtlan, Oaxaca, la Policía Federal reprimió violentamente a profesores y padres de familia.
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) había bloqueado distintas vialidades de Nochixtlan, por lo que la Policía Federal intervino.
Aunque las autoridades señalaron que las vialidades fueron desalojadas con balas de goma y gases lacrimógenos. A través de redes sociales se viralizaron como policías accionaban sus armas de fuego contra los manifestantes.
Según las cifras oficiales en el enfrentamiento resultaron heridas 108 personas, 53 fueron civiles y 55 policías, mientras que se reportaron 8 muertos.
Sin embargo, la CNTE informó que fueron 10 personas, 9 de ellos eran padres de familia que apoyaban la manifestación y uno más era un profesor.
Por su parte el entonces gobernador oaxaqueño, Gabino Cue, justificó los hechos diciendo que eran para “recobrar la gobernabilidad y el estado de derecho”.
Este viernes 19 de junio, a cuatro años del violento operativo, el líder sindical de la Sección 22, Eloy López Hernández, señaló que el gobierno de EPN:
“Querían darle el tiro de gracia al sindicalismo, pero se equivocaron, no contaban con que la sociedad mixteca saliera a defender a sus maestros”.
Hasta la fecha el caso se sigue analizando en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).