Joshcar tenía apenas 5 años. Fue golpeado hasta el cansancio por su padrastro mientras su madre no hizo nada por detener la agresión.
Regeneración, 25 de octubre de 2017.- A Joshcar, un niño de 5 años, lo asesinaron sus padres porque se orinó en la cama.
Su padrastro, Absalón Jovanny lo despertó a cachetadas y lo bañó con agua fría mientras le gritaba “¡Eres un cochino!”, todo lo vio su hermano mayor, de 9 años.
El pasado 19 de octubre, luego de despertarlo a golpes, Absalón llevó al niño a otra habitación y comenzó a pegarle, lo obligó a bañarse con agua fría por orinarse en la cama y ensuciar su ropa interior. Cuando salió del baño lo siguió golpeando hasta que el menor se quedó quieto en el suelo.
Después, el padrastro se sentó a ver televisión. Patcy, la madre y Absalón, llamaron a Joshcar y ya no respondió, por lo que el hermano mayor salió corriendo a casa de sus abuelos para avisarles lo que vio.
Los abuelos relataron que Patcy se llevó a sus hijos a vivir con ella y su pareja sentimental, Absalón Jovanny, quien los maltrataba.
Cuando llegaron a la vivienda, los abuelos trasladaron a Joshcar al Hospital Comunitario de Jonacatepec en Morelos debido a su cercanía, pero por la gravedad de sus lesiones, tuvo que ser trasladado al Hospital del Niño y el Adolescente Morelense, donde se le diagnosticó la muerte cerebral.
Como se informó este martes en diversos medios, Absalón y Patcy se contradijeron, primero dijeron que estaban jugando y se les pasó la mano, luego que un perro atacó a Joshcar.
Por el asesinato del menor, Absalón fue detenido en el centro de Cuautla, Morelos, pero la madre del menor sigue prófuga de la justicia y la Fiscalía aún no determina si se le imputarán cargos por homicidio o solo como cómplice del acto atroz.
Este martes, durante la comparecencia del padrastro, se le realizó la imputación formal por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa y deberá permanecer en prisión preventiva como medida cautelar.
De acuerdo con Periódico Central, Joshcar y su hermano, Carlitos, eran de padres biológicos distintos y cuando nacieron sus abuelos maternos se hicieron cargo de ellos pues su madre nunca quiso responsabilizarse.
Pero luego, Patcy decidió llevárselos y vivir con Absalón, se fueron a la casa de su suegra y de inmediato comenzaron los maltratos y golpes. Los abuelos, al visitar a los niños se dieron cuenta que estaban desnutridos, tenían golpes y no iban a la escuela.
La abuela de los niños acudió al DIF de Chietla, en Puebla e hizo todo lo posible por quitarle la custodia de los niños a su hija, pero en la dependencia hicieron caso omiso, se limitaron a decir que «no tenían personal».
Con información de Periódico Central