Estudiantes de medicina de 47 países, permitieron hacer un análisis macro sobre las condiciones en las que estudian los futuros médicos.
Regeneración, 23 de diciembre de 2016.– Las tasas de depresión son altas en estudiantes de medicina en todo el mundo, según datos de una revisión sistemática y un metanálisis de casi 200 estudios en los que participaron 129 mil estudiantes de medicina de 47 países.
Más de una cuarta parte de los estudiantes de medicina padecen depresión o síntomas depresivos, y más de 1 de cada 10 informan ideas suicidas durante sus estudios, reveló el análisis. Sin embargo, sólo una minoría de los estudiantes que resultan positivos en la evaluación de la depresión busca ayuda profesional.
El estudio fue publicado en el número del 6 de diciembre de JAMA, que es un número temático en torno a la educación médica.
Estudio original:
Este análisis «proporciona la perspectiva más completa que alguna vez se haya publicado sobre la prevalencia de la depresión y las ideas suicidas, así como sobre el tratamiento psiquiátrico en estudiantes de medicina. Nuestro estudio es una especie de respuesta fundamental en este tema, en esta época», manifestó a Medscape Noticias Médicas el Douglas A. Mata, maestro en salud pública, del Brigham and Women’s Hospital y la Harvard Medical School, en Boston, Estados Unidos.
El estudio demuestra que la «depresión y las ideas suicidas son muy frecuentes en estudiantes de medicina, en comparación con personas de más o menos la misma edad en la población general, que no son estudiantes. Básicamente, lo que tenemos en las manos es una especie de epidemia oculta que se está manifestando y necesitamos descifrar cómo vamos a atacarla», expresó Mata.
Sobre la base de datos de 167 estudios transversales y 16 longitudinales de 43 países, la prevalencia combinada global estimada de depresión o síntomas depresivos fue de 27.2 por ciento y fluctuó de 9.3 a 55.9 por ciento, informan los investigadores. La prevalencia de síntomas depresivos se mantuvo relativamente constante durante el periodo de estudio (1982 a 2015).
Los nueve estudios longitudinales que evaluaron los síntomas depresivos antes y durante la carrera de medicina, revelaron un incremento absoluto mediano de 13.5 por ciento en los síntomas. Las estimaciones de la prevalencia no fueron muy diferentes entre los estudios de sólo estudiantes preclínicos y los estudios de sólo estudiantes clínicos (23.7 por ciento frente a 22.4por ciento).
Entre los estudiantes de medicina que resultaron positivos para la detección de depresión, únicamente 15,7 por ciento buscó tratamiento psiquiátrico.
Con base en los datos de 24 estudios transversales de 15 países, la prevalencia combinada global estimada de ideas suicidas fue de 11.1 por ciento.
«En el pasado, mucha investigación sobre el tema fue de tipo reactivo más que proactivo. Cuando el estudiante se deprime se conecta con los recursos de tratamiento, pero considero que debe haber más iniciativa en las intervenciones para el bienestar, que se promuevan entre los estudiantes, con las que tratemos de evitar que las personas se depriman, en primera instancia», manifestó el Dr. Mata.
El investigador considera que el sistema global para la capacitación de estudiantes de medicina «debe cambiar, lo que implicaría disminuir las horas de trabajo y presión ejercida a los estudiantes, hecho que les permitiría desempeñarse mejor. Esto se ha demostrado en algunos estudios previos».
«Las personas se han enfocado en enseñar bienestar y autocuidado, pero con esto se ignoran en principio los problemas ambientales que existen en la escuela de medicina y el hospital, que dan lugar a estos problemas, como la privación de sueño crónica», añadió.
Desde hace por lo menos dos años en México, varios médicos se manifestaron contra las arduas jornadas de trabajo tanto para los médicos de base como de los estudiantes en prácticas en los hospitales.
Vía Medscape.