El expresidente Vicente Fox insultó a los ciudadanos que piensan votar por AMLO antes del arranque de campaña del candidato presidencial de Morena
Regeneración, 1 de abril de 2018.- Este domingo arrancó la campaña del candidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador, entre muestras de apoyo en todo el país y en el extranjero. A la par, el expresidente de México, Vicente Fox, salió para llamar «perrada de Lopitos» a los ciudadanos que simpatizan con el tabasqueño y piensan votar por él.
A través de sus redes sociales, Fox, con su peculiar redacción, pidió a los opositores de López Obrador «hacerse escuchar» por «la perrada de Lopitos».
«Las voces que no quieren a @lopezobrador_ en #LaGrande2018 deben hacerse escuchar. No permitamos que estas advertencias pasen desapercibidas por la perrada de Lopitos ¡México merece mejor que él!», escribió.
Las voces que no quieren a @lopezobrador_ en #LaGrande2018 deben hacerse escuchar. No permitamos que estas advertencias pasen desapercibidas por la perrada de Lopitos ¡México merece mejor que él!
— Vicente Fox Quesada (@VicenteFoxQue) 1 de abril de 2018
En una entrevista para Milenio, Fox había dicho escuetamente que llama «Lopitos» a López Obrador «por chiquito», pero no ha explicado por qué insulta a los simpatizantes del puntero en las encuestas.
¿Porque Vicente Fox le dice ‘Lopitos’ a AMLO? https://t.co/1EqHbhiydC pic.twitter.com/MTpug5whzy
— Regeneración (@RegeneracionMx) 11 de marzo de 2018
Políticos que insultan a los votantes
Sobre lo anterior es interesante recordar un caso en el que un político insultó a los votantes de su contrincante y la jugada le salió absolutamente contraproducente.
Se trata de Hillary Clinton, quien, en septiembre de 2016, llamó «deplorables» a «la mitad» de los ciudadanos estadounidenses que pensaban votar por Trump.
La declaración le salió cara a la entonces candidata presidencial demócrata, pues afianzó la opinión negativa que ya tenían de ella los votantes de Trump. Además fue criticada en diversos medios por atacar a ciudadanos en vez de atacar a su contrincante.
Días después, Clinton tuvo que declarar que se había «arrepentido» de decir eso y aseguró que estaba «equivocada». Esto sentó uno de los ejemplos más recientes de que no se debe insultar a la ciudadanía que vota.