El Tercer Tribunal Colegiado en el Estado de Quintana Roo otorgó un amparo que lo exonera de cualquier responsabilidad relacionada con la tortura de Lydia Cacho. La periodista denunció que las magistradas aceptaron sobornos.
Regeneración, 27 de julio del 2021. El Tercer Tribunal Colegiado en el Estado de Quintana Roo otorgó un amparo al empresario José Kamel Nacif Borge que lo libera de cualquier responsabilidad por el delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho.
De acuerdo con Artículo 19, el amparo fue liberado el 15 de julio y con ello se abre camino para absolver al resto de los acusados, quienes fueron detenidos por su presunta responsabilidad en el delito de tortura contra Cacho.
La defensora de derechos humanos y la organización informaron en un comunicado que el órgano judicial consideró que la aprehensión y tortura, hechos ocurridos el 16 y 17 de diciembre de 2005, no tuvieron relación con la publicación del libro Los Demonios del Edén: el poder de la pornografía infantil en México.
La magistrada Selina Ahidé Avante Juárez y la secretaria de tribunal en funciones de magistrada, Graciela Bonilla González, votaron a favor de otorgar el amparo; mientras que el magistrado Jorge Mercado Mejía lo hizo en contra.
El Segundo Tribunal Unitario de Quintana Roo negó un amparo a Nacif en abril pasado. Por ello, el empresario decidió realizar un nuevo recurso de revisión, con el número 143/2021.
¿Cuáles fueron los argumentos para aceptar el amparo?
Las magistradas dijeron que no existe «prueba fehaciente” sobre la existencia de una orden para torturar a la periodista por publicar el libro y que todo lo que sucedió es responsabilidad de los dos policías que detuvieron a Cacho. Además, indicaron que no era relevante que los uniformados fueran acompañados por vehículos de Nacif, cuando trasladaron a la periodista de Puebla a Cancún y de regreso.
Lydia Cacho y Artículo 19 subrayaron que el Tercer Tribunal realizó un análisis sesgado al analizar las conversaciones telefónicas entre el exgobernador de Puebla, Mario Marín, o el «gober precioso» y Nacif.
Avante y Bonilla opinaron que cuando Marín expresó que «acababa de dar un pinche coscorrón a esta vieja cabrona (sic)», se trata de una afirmación “vaga y genérica” que en México es utilizada para identificar a una mujer; sin embargo, no puede concluirse que se trata de Lydia de «entre todas las mujeres del mundo» porque no dicen su nombre.
En octubre de 2020, el equipo jurídico de Lydia Cacho obtuvo información de que Marín y Nacif corrompieron a exconsejeros de la judicatura federal para que intervinieran a magistradas y magistrados; con el objetivo de evitar una nueva orden de aprehensión.
Por ello, la defensora de derechos humanos y la organización exigieron una investigación pronta, imparcial, independiente y eficaz sobre los presuntos actos de corrupción acontecidos en el seno del Poder Judicial de la Federación.
Aunado a ello, hicieron un llamado al presidente de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, Arturo Zaldívar, para que depure el aparato judicial del país. Así se garantizará una justicia imparcial, independiente y transparente en el resto del proceso.
La corrupción concedió el amparo de Kamel Nacif
Lydia Cacho reveló a Proceso que Avante Juárez y Bonilla González recibieron un soborno para emitir ese fallo, según fuentes del Poder Judicial Federal. Asimismo, sostuvo que ambas funcionarias usaron los mismos argumentos que el primer juez que llevó su caso hace 16 años; él manifestó que la orden de aprehensión en contra de la periodista estaba justificada porque no se acreditó su profesión.
La comunicadora denunció que las magistradas son afines al Partido Revolucionario
Institucional y tienen relación con el exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Ángulo. Ambas se integraron al tribunal federal un mes después de que se celebraran las elecciones para renovar diputaciones federales el pasado 6 de junio.
Por ello, Cacho afirmó que la delincuencia organizada opera en la Fiscalía General de la República, en el Poder Judicial y en la cuarta transformación.