Según la investigación brasileña contra la empresa Odebrecht, Felipe Calderón podría estar conectado en la red de corruptelas y fraudes que hizo la empresa para beneficiarse y que aseguró sobornando funcionarios.
Regeneración, 02 de marzo de 2017.- Felipe Calderón, ex presidente de México, podría estar involucrado en el caso de la empresa brasileña Odebrecht, acusada de hacer una serie de sobornos a funcionarios y mandatarios en todo el continente americano y hasta África, para lograr su desarrollo.
Según una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción, las indagatorias oficiales que se llevan a cabo en Brasil, involucraron directamente a la presidencia de la República durante el periodo de Calderón Hininojosa y al menos un correo en el que aparece su nombre es una de las pruebas en el caso.
El mensaje, en el que aparece el nombre del ex mandatario, está fechado el 8 de diciembre del año 2009, cuando estaba a la mitad de su mandato, iniciado en 2006, y dice así:
Querido tricolor.
Necesito tu ayuda con respecto a este tema: Hacer un esfuerzo para que LILs (Luis Ignacio Lula da Silva) acepte una invitación especial de Calderón de ir a México a principios de febrero.
Cuando puedas me llamas, para hablar al respecto.
Abrazo
R.
«También en ese momento, Braskem una filial de grupo Odebrecht, considerada la empresa líder en América Latina en la división de petroquímica, tenía algo que festejar en México: estaban por cerrar un negocio que le dejaría ventas estimadas en 2 mil millones de dólares anuales», escribieron Daniel Lizárraga y Raúl Olmos, autores de la nota.
Para alcanzar esa meta, se requería que Pemex les vendiera a «precio preferencial», 66 mil barriles diarios de gas etano.
El negocio, habría presuntamente comenzado desde que Petróleos Mexicanos (Pemex), le cedió a Braskem, la filial brasileña de Odebrecht, y la compañía mexicana IDESA la construcción de Etileno XXI,una plata que proveería polietileno y permitiría dejar de importar el producto.
De esta manera, dos ejecutivos de Odebrechet: Roberto Prisco Ramos y Alexandro Alencar, quienes gestionaron una reunión entre Calderón y el entonces presidente de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva como parte de su estrategia de negocios en Pemex.
Dos meses después de aquel correo electrónica, Da Silva y Calderón se reunieron en Quintana Roo, luego de lo cual emitieron un comunicado conjunto en el que se felicitaron por la inversión de 2 mil 500 millones de dólares que realizaría el grupo IDESA (mexicano) y Braskem (brasileño) para la construcción del complejo químico en Veracruz.
Por este proyecto, Pemex canceló tres proyectos de infraestructura propios, para no competir con la inversión de Odebrecht.
Además de este proyecto, este consorcio ganó contratos en Pemex derivados de 4 grandes obras por más de 2 millones de dólares y no sólo por 39 millones de dólares como lo han declarado sus ejecutivos. Y trasciende que entre el 2010 y 2014, se entregaron 10.5 millones de dólares a funcionario en México.
Las facilidades en México para el gigante brasileño, parecen ser especialmente buenas durante el gobierno de Calderón, pues además de los contratos, dos bancas de desarrollo otorgaron créditos a Braskem: Nacional Financiera (Nafin), que les prestó 280 millones de dólares y el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), con 120 millones de dólares.
Mientras tanto, el jucio que se lleva en Brasil, como resultado del posible tráfico de influencias que involucra al ex presidente Lula da Silva y a los directivos y funcionario de Odebrecht, podrían involucrar a Felipe Calderón y las facilidades que se otorgaron a la empresa brasileña.
Vía Mexicanos Contra la Corrupción.