Miguel Ángel Mancera anunció que la contaminación de la Ciudad de México irá empeorando, se espera que esta temporada de ozono tenga “momentos complicados”. Su estrategia: una aplicación que monitorea la calidad del aire que indica cuándo es bueno salir.
Regeneración, 13 de febrero de 2017.- Esta temporada de ozono tendremos momentos complicados, afirmó el jefe de gobierno de la Ciudad de México Miguel Ángel Mancera.
La temperatura aumenta conforme pasan los días, y a finales de febrero se verá un incremento en la temperatura que se registra en la Ciudad. Esto se debe a que las masas de aire frío arrastradas desde el norte del continente tienen un menor impacto en la temperatura de la ciudad y los días despejados son cada vez más frecuentes.
El clima de la ciudad de México en primavera, según el Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México, se caracteriza por cielos despejados, lluvia escasa, y una temperatura confortable con días cálidos y noches frescas. Las condiciones de este clima templado favorecen la formación del ozono y el smog fotoquímico. Con el primer día de marzo inicia la temporada de ozono.
El ozono es un compuesto que se forma en la atmósfera durante las horas de sol a partir de los contaminantes que emitimos diariamente al aire a través de los escapes de nuestros automóviles y las chimeneas de la industria. El ozono es un gas incoloro, sin embargo, en altas concentraciones es posible sentir su presencia en el aire ya que provoca ardor de ojos e irritación en la garganta, en personas asmáticas puede activar un episodio de asma, informa el Sistema de Monitoreo de la ciudad.
“He estado haciendo sobrevuelos estos días y hemos estado observando con preocupación las subidas de temperatura y la ausencia de viento”, dijo Mancera, que puntualizó que estos días se han registrados apenas uno o dos nudos de viento que no ayudan a disipar los contaminantes de la ciudad.
Durante la presentación del pronóstico de la calidad del aire por concentraciones de ozono, Mancera aseguró que con la aplicación se podrán tomar mejores medidas ante posibles contingencias ambientales. Con la nueva función se podrán conocer con 24 horas de anticipación las condiciones del aire en la Zona Metropolitana del Valle de México para con ello tomar en cuenta recomendaciones sobre actividades al aire libre.
El sistema de monitoreo está planeado para medir concentraciones de partículas dañinas para la salud, las PM 2.5, «estas partículas pueden introducirse en el cuerpo humano a través de la piel y las venas y afectar el sistema respiratorio», afirmó Mario Molina, premio Nobel de química.
En los últimos años, la calidad del aire de la Ciudad de México es raramente considerada «buena». Según el informe de calidad del aire del Sistema de Monitoreo Atmosférico, la concentración de ozono en el aire respirable superó el valor límite permitido por la norma NOM-02Q-SSA1-2014, 212 días del año.
Con información de Sistema de Monitoreo Atmosférico y El Universal.