La agencia calificadora, también advirtió que si López Obrador ganara en 2018, retrasaría las reformas estructurales, en especial la energética, reforma que formó parte de la generación de los gasolinazos y se quedó corta, porque no ha sido lo que se esperaba, dicho por el mismo Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Regeneración, 29 agosto 2017.- La casa calificadora Moody’s consideró que la corrupción que ha caracterizado la administración de Enrique Peña Nieto aumentan las probabilidades de que gane en 2018 el candidato de Morena. La baja popularidad del presidente favorece las aspiraciones presidenciales de Andrés Manuel López Obrador.
“El presidente Enrique Peña Nieto del PRI ha visto disminuir sus índices de aprobación debido en parte a acusaciones de corrupción. La impopularidad del presidente puede influir en las perspectivas electorales del PRI el próximo año. Esto último aumenta la probabilidad de una victoria del candidato Andrés Manuel López Obrador de Morena, que lidera las encuestas”, dijo.
La agencia calificadora, también advirtió que si López Obrador ganara las elecciones en 2018, retrasaría la implementación de las reformas estructurales, en especial la energética, reforma que formó parte de la generación de los gasolinazos y se quedó corta, porque no ha sido lo que se esperaba, dicho por el mismo Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
“Aunque es improbable que una presidencia de López Obrador sea capaz de revertir las reformas, pues no contaría con los suficientes votos en el Congreso para hacerlo, su administración podría retrasar la implementación de las reformas en marcha, particularmente las del sector petrolero”, dijo Moody’s.
En su reporte de riesgos políticos en América Latina, la agencia explicó que al político tabasqueño se le conoce por su rechazo a las reformas aprobadas durante la actual administración de Enrique Peña Nieto.
En julio, Andrés Manuel López Obrador anunció que llamará a referéndum a la ciudadanía para que opinen y se cancelan las reformas estructurales, principalmente la energética.
Expuso que “hemos tomado el acuerdo de convertir la elección presidencial del 2018 en un referéndum, es decir, al mismo tiempo que se elija presidente, se estará decidiendo si se mantienen o derogan las llamadas reformas estructurales”, indicó.
Moody’s indicó que la información que tiene no indica que el Tratado de Libre Comercio conduzca a mayores aranceles y que las negociaciones se convertirán en un tema de campaña en 2018.
“Hasta la fecha, no hay indicios de que las negociaciones puedan conducir a mayores aranceles o restricciones comerciales cuantitativas, como se pensaba inicialmente”.
“Los inversores nacionales y extranjeros han reaccionado favorablemente a las indicaciones de cambios limitados, ayudando a apoyar el sentimiento positivo de los inversionistas. Las negociaciones comerciales, que tendrán lugar a principios de 2018, podrían convertirse en un tema contencioso en la campaña electoral del próximo año”, dijo.
Con información de El Financiero y E-consulta