Reporteros Sin Fronteras aseguró que México “está marcado por una larga serie de asesinatos de periodistas, crímenes relacionados con la corrupción y el narcotráfico… Patria de los cárteles de la droga, México sigue siendo el país más mortífero de América Latina”.
Regeneración, 20 de abril de 2016.- México afronta una “situación difícil” para la libertad de prensa según la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa que realiza Reporteros Sin Fronteras (RSF). El país se sitúa en el lugar 149 de 180 naciones evaluadas.
La organización internacional dijo que México, Colombia y la mayoría de países de Centroamérica padecen los estragos del crimen organizado; cárteles, narcotraficantes y grupos paramilitares. Agregó que el trabajo de investigación que se realiza es peligroso y en ocasiones imposible “frente a la determinación y el grado de violencia que se alcanza, que va hasta las decapitaciones”.
Reporteros Sin Fronteras aseguró que México “está marcado por una larga serie de asesinatos de periodistas, crímenes relacionados con la corrupción y el narcotráfico… Patria de los cárteles de la droga, México sigue siendo el país más mortífero de América Latina para los medios de comunicación. Los periodistas asesinados, a menudo son ejecutados a sangre fría y la mayoría de los crímenes permanecen impunes”.
Comenta que la impunidad es resultado de la corrupción que impera en el país y de los vínculos que tienen políticos con el crimen organizado. Así como en el plano económico, refiere que en el paisaje mexicano se encuentran dos grupos que poseen la mayoría de los canales de televisión.
El informe también menciona que la situación de la libertad de prensa en el continente Americano se deterioró en 2015 por las crecientes tensiones políticas en varios países, la recesión económica, la incertidumbre sobre el futuro y los repliegues comunitarios.
La violencia institucional, el crimen organizado, la impunidad, la corrupción, la concentración de medios de comunicación y la vigilancia en Internet, especialmente en Estados Unidos, fueron considerados como los principales obstáculos a la libertad de prensa en la región.
“En América es frecuente que las autoridades ejerzan cierto control sobre los medios de comunicación. […] La cobertura de temas delicados, como la corrupción, da lugar a procesos legales por difamación”, dice la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de RSF en su análisis sobre el continente.
Christophe Deloire, Secretario General de Reporteros Sin Fronteras, dijo que “es un hecho notorio que numerosos dirigentes en el mundo han desarrollado una especie de paranoia frente al ejercicio legítimo del periodismo”.
“El clima general de miedo acarrea un odio creciente al debate y al pluralismo, un bloqueo de los medios de comunicación por parte de gobiernos en plenos excesos autoritarios y liberticidas, así como una influencia creciente de los intereses particulares en la información, en el sector privado”, dijo Deloire.
Por ello manifestó la necesidad de defender al periodismo “digno de ese nombre frente al incremento de la propaganda y de la información dictada o patrocinada por los intereses particulares. “Garantizar el derecho de los ciudadanos a una información independiente y fiable es una de las soluciones a los problemas locales y globales que enfrentamos”, añadió.
Con información de Sin Embargo.