De la familia Reyes a la opinión pública

A los medios de comunicación,
Al pueblo de México.
 
Ante la indolencia de las autoridades del Estado de Chihuahua para  brindar condiciones de vida adecuadas y garantizar seguridad de sus  habitantes, la familia Reyes Salazar ha decidido trasladar a la Ciudad  de México, su exigencia de presentación con vida de los desaparecidos  María Magdalena Reyes Salazar, Elías Reyes Salazar y su esposa Luisa  Ornelas Soto. ¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
 
La familia Reyes Salazar ha sido agraviada de forma sistemática en  varias ocasiones. Recordemos que en enero de 2010 murió asesinada por  un comando paramilitar, Josefina Reyes Salazar, activista por los  Derechos Humanos y luchadora social del Valle de Juárez. En 2008, murió  asesinado su hijo Julio César. En Agosto de 2010 murió también  asesinado Rubén Reyes Salazar.
 
El día de hoy la familia sufre la ausencia de Malena, Elías y su esposa  Luisa. En este contexto, la casa de la señora Sara Salazar fue  incendiada, mientras ella se encontraba en un plantón en la  Subprocuraduría de Justicia Zona Norte, exigiendo la libertad de sus  hijos.
Por si esto fuera poco, el subprocurador Jorge González Nicolás no ha  dado audiencia a la familia, a pesar de que le fue solicitado desde el  primer día de plantón. Este hecho, inaceptable en un funcionario  público es insultante por lo cual le exigimos su renuncia.
Sabedores de que en Chihuahua, la impartición de Justicia se ve  supeditada a la condición económica y social del agraviado, y en un  intento desesperado por recuperar con vida a sus hijos, Doña Sara  Salazar, Marisela Reyes, familiares y activistas instalarán un plantón  afuera de la Cámara de Senadores, con el objetivo de obtener la  inmediata presentación con vida de los desaparecidos.
 
En este plantón son bienvenidas todas las manifestaciones en el sentido  de paz, justicia y desmilitarización, a lado de la exigencia de  presentación con vida de nuestrxs desaparecidos.
¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!
 
Atentamente,
Familia Reyes Salazar